La actriz mexicana Yalitza Aparicio, señaló que el rechazo y la discriminación contra la población indígena en México, en especial hacia las mujeres, ha ido cambiando en los últimos años, pero que este cambio sucede lentamente.
“Llevamos un avance algo lento, pero siempre he dicho que es mejor avanzar poco a poco que estar varados”, señaló Aparicio, de 27 años y quien participó en una clase magistral sobre mujeres y juventudes indígenas en la economía creativa en días pasados.
“Ha sido increíble ver como la sociedad mexicana ha ido reaccionando ante este tema (…) y si va cambiando, algo lento, pero vamos avanzando”, agregó la actriz en el encuentro promovido por la oficina de la Unesco en México en donde contó que para ella resultó sorpresivo ver el debate que provocó su participación en la película “Roma” (2018).
“Fue duro y fuerte lo que me tocó vivir, pero fue más duro descubrir que en nuestra propia casa desconocíamos sobre las comunidades indígenas y la rechazábamos de manera cruel”, apuntó al mismo tiempo que dijo que el cine ha cumplido una función que es el “impactar la vida de las personas en un tema social tan grande”.
Aparicio participó el día de ayer, en la plática que se llevó a cabo en colaboración con el canal de televisión Lifetime y la Universidad Anáhuac, junto con su colega Sótera Cruz, de 17 años, quien al igual que ella, nació en el estado de Oaxaca. Ambas actrices protagonizaron películas interpretando a mujeres indígenas.
En el caso de Cruz en la cinta “El ombligo de Guie’dani” (2018), ópera prima del director Xavi Sala. La historia en la que actuó Cruz es la de una niña y su madre, originarias de una comunidad indígena de Oaxaca, que viajan a Ciudad de México para laborar como trabajadoras domésticas de una familia acomodada.
Sobre la representación indígena, a veces estereotipada en los medios de comunicación, Aparicio consideró que los medios deberían mostrar a esa población “tal cual, como seres humanos, porque muchas veces nos llevan a otro punto y más allá de motivarnos dan un mensaje contrario ya que nos siguen mostrando en imágenes idealizadas”.