Alfredo Guevara.-
Cd. Victoria, Tam.-
El rezago que pudieran traer los alumnos en el nivel de aprendizaje, tras casi 18 meses de la pandemia y llevar las clases en línea, será atendido por el maestro cada viernes, adelantó el secretario de Educación de Tamaulipas, Mario Gómez Monroy.
Admitió que el retraso, o bien, lo que se ha perdido a causa de la pandemia en los alumnos, es difícil cuantificarlo, pero que los maestros tienen la instrucción de ponerle más atención a quienes presenten problema en el nivel de aprendizaje, durante un mes.
Estimó que donde podría presentarse esta problemática en los estudiantes es en las escuelas del medio rural o municipios pequeños, en los que desafortunadamente, por la falta de conectividad, los alumnos tuvieron problema para empaparse de los temas tratados en línea.
Afortunadamente, los municipios cuyo semáforo epidemiológico se encuentran en verde e iniciarán las clases presenciales, son donde se encuentran estos alumnos, a los que se les pondrá más atención para actualizarlos en el nivel de aprendizaje.
Recordó que por las condiciones económicas de los padres de familia y la falta de conectividad los alumnos pudieron haber tenido problema para dar seguimiento puntual a las clases desde sus casas y, por tanto, el nivel de aprovechamiento puede no ser el mismo que en la zona urbana.
“En las grandes ciudades hay más conectividad, más contacto, creo que en ciudades como Victoria, Matamoros, Tampico, Nuevo Laredo, Reynosa y otras no tuvieron problema los alumnos, porque hasta con celular pudieron tener sus clases en línea con toda normalidad”, aseveró el Secretario de Educación.
Gómez Monroy adelantó que desde el 30 de agosto el programa educativo se enfocará en materias que tienen que ver con las matemáticas y lenguaje, consideradas como las más complicadas para la mayor parte de los alumnos, sobre todo ahora que estuvieron estudiando en línea.
Para este regreso a clases presenciales, el funcionario aseguró que cada una de las instituciones educativas dispondrá de por lo menos un mes para tratar de corregir cualquier grado de rezago que pudiera traer el alumnado en materia de aprovechamiento educativo.
