diciembre 15, 2024
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Entregan medalla “Luis García de Arellano” …¡a otro reynosense!

septiembre 28, 2021 | 159 vistas

Por Rogelio Rodríguez Mendoza.-

Cd. Victoria, Tamaulipas.- El pintor Artemio Guerra Garza, recibió la medalla al merito “Luis García de Arellano” 2020, para convertirse en el tercer reynosense premiado con la presea por el Congreso del Estado, en los últimos cuatro años.

En sesión extraordinaria, pública y solemne, celebrada este martes, el Pleno Legislativo entregó la medalla a quien se ha distinguido como pintor, escultor y muralista en el ámbito nacional e internacional.

Fue el gobernador, Francisco García Cabeza de Vaca, quien asistió como invitado a la asamblea parlamentaria, el encargado de colocar la medalla al galardonado.

La diputada , Sara Roxana Gómez Pérez, leyó una reseña de Guerra Garza, nacido en Reynosa el cinco de noviembre de 1946.

Estudió pintura en la Casa del Arte en Ciudad Victoria, y ha expuesto sus obras en ciudades como San Antonio y Mc Allen, Texas; Nueva York y Filadelfia.

Su afición por la pintura nació a los 11 años de edad. Su primer oleo fue una copia de un cartel taurino.

En su participación, Guerra Garza agradeció el reconocimiento y pidió compartir los créditos con su esposa, Elva Pérez de Guerra, presente en la sesión plenaria.

Al concluir la asamblea parlamentaria, el pintor fue trasladado hasta el muro de honor para develar una placa con su nombre.

Los otros tres galardonados con la medalla al merito “Luis García de Arellano” por la actual administración panista, son, en 2017, monseñor Oscar Guadalupe Medina; en 2018, el doctor Enrique Hong Chong y en 2019, la maestra Diana Guardiola Sáenz.

Aunque nació en Nuevo Laredo el 4 de febrero del 1945, el sacerdote Lozano Medina ejerce su sacerdocio en la iglesia Guadalupe, en Reynosa, mientras que Guardiola Sáenz también es originaria del municipio fronterizo.

Hong Chong es originario de Tampico.
Cabe señalar que, en el caso de Guardiola Sáenz, su premiación fue calificada por la diputada morenista, María de la Luz Castillo Torres, como una imposición, al considerar que no reunía los méritos para recibir la medalla.

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