México figura entre los 10 países con mayor número de muertes por COVID-19, incluyendo a los trabajadores de la salud.
A México se suman Estados Unidos, Brasil, Perú y Colombia, detalla el informe La prolongación de la crisis sanitaria y su impacto en la salud, la economía y el desarrollo social.
El documento fue elaborado de manera conjunta entre la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
Las muertes afectan de manera desproporcionada a ancianos y a hombres, aunque todos los grupos de edad se han visto afectados en número de casos, más concentrado en los grupos de edad de 25 a 39 años”, indicó Carissa Etienne, directora de la OPS.
Durante la fase de mayor emergencia de la pandemia México destacó en aumentar la capacidad de atención hospitalaria, particularmente la de cuidados intensivos.
Sin embargo, las muertes por COVID-19 de personas menores de 60 años superaron el 50 por ciento de las defunciones totales para finales de junio pasado.
Dicha tendencia, argumenta el informe, pudo deberse al surgimiento de nuevas variantes y a que los adultos mayores fueron los primeros en ser vacunados.
En cuanto a las políticas de funciones esenciales de salud pública la OPS y Cepal identificaron en México varias ‘debilidades‘ como retraso en la notificación de casos, capacidad limitada de pruebas COVID-19, aislamiento inadecuado de pacientes, falta de información sobre mortalidad y falta de medidas preventivas.
Asimismo medidas estrictas que resultaron en desempleo e informalidad laboral y problemas de coordinación sectorial e intersectorial.
La directora de la OPS lamentó que América Latina y el Caribe sea epicentro de la pandemia de COVID-19 con más de 91.7 millones de casos y 2.3 millones de muertes.