En la comunidad de Salamá, Olancho, en Honduras, los pobladores amarraron a un niño de 15 años, por que aseguraban que el joven estaba poseído por el demonio por jugar Free Fire.
Los hechos fueron captados en video y compartidos en redes, donde conmocionó a los usuarios por lo impactante de las imágenes.
La ciudadanía supuestamente quería “liberarlo del mal”, así que lo amarraron y se pusieron a rezar a su alrededor.
Durante el proceso el joven emitió algunas palabras ininteligibles.
Las opiniones en redes sociales fueron divididas, mientras que unos opinaban que la acción era exagerada, incluso podría calificarse de maltrato infantil, otros pensaron que la población había hecho lo correcto.
Esto sucede cuando en México los videojuegos enfrentan una ola de críticas por los “peligros” que supone pasar muchas horas frente a una consola.
Con información de: plumasatomicas.com
