Actualmente, existen muchos programas que nos facilitan la edición de un video. Si bien hay diferencias entre ellos, la mayoría nos permitirá resolver de manera eficiente la postproducción de cualquier producto audiovisual.
Muchas veces, cuando queremos realizar un video promocional para nuestra marca, un video educativo para nuestros alumnos o simplemente una película hogareña, dudamos de nuestros conocimientos a la hora del montaje y la edición.
Sin embargo, pronto veremos que es bastante sencillo generar nuestros propios videos y editarlos a nivel profesional. Aquí, repasamos una guía básica para comenzar en este apasionante mundo de la edición audiovisual.
1. Seleccionar el editor de video
En este punto, se presentan múltiples opciones y variables. Debemos definir si vamos a trabajar desde una PC o un celular, en primer lugar, ya que hay programas diseñados para ambos dispositivos.
Luego podremos profundizar en las características de cada uno (funciones, efectos, precio) para decidirnos por el editor que mejor se adapte a nuestras necesidades.
2. Importar el material
Una vez instalado el programa, hay que crear un nuevo proyecto. Luego, debemos importar el material que tengamos para nuestro video. La mayoría de los editores son compatibles con casi todos los formatos de video.
Ya sea que hayamos grabado con equipos profesionales, celulares o incluso cámaras web, todos los archivos multimedia pueden ser incorporados a nuestro proyecto. A su vez, también se pueden importar imágenes y archivos de audio.
3. Organizar el clip
A la hora de organizar nuestro material, debemos tener visualizado el producto final. Es clave saber cómo nos gustaría que quede el video terminado para acomodar los clips que tengamos en el orden correcto.
A su vez, al utilizar un editor de videos, podemos superponer audios (ya sea grabados o descargados de internet) o incluso música. Esta función nos permite sincronizar el audio con la imagen.
4. Aplicar efectos visuales
Una vez que tengamos todo ordenado en la línea del tiempo del editor, procederemos a agregar efectos de video. Podemos insertar transiciones, modificar los colores, agregar rótulos, efectos especiales, etcétera.
Otro recurso que nos ofrece el editor de videos es subtitular nuestro proyecto. En el caso de que esa sea nuestra intención, se pueden sincronizar los subtítulos automáticamente y podemos acomodar su tamaño, color y forma a nuestro gusto.
5. Exportar el video final
Al finalizar el proceso de postproducción de nuestro video, estamos listos para el momento de exportarlo. Para esto, debemos tener en cuenta la finalidad del video (YouTube, redes sociales, cine) ya que de ello depende el formato.
Existen muchos formatos diferentes de exportación de video así que debemos siempre tener presente cuál es la opción que mejor se adapta a nuestras necesidades. Luego podremos enviarlo digitalmente o grabarlo de manera física en un CD, DVD o USB Drive.
Ya tenemos todas las herramientas necesarias para comenzar a utilizar un editor de video. Con estos sencillos pasos, podremos trabajar en el montaje de nuestros productos audiovisuales igual que lo haría un profesional.