El gobierno austriaco ordenó el confinamiento general de al menos veinte días a partir del 22 de noviembre, y la vacunación obligatoria de toda la población a partir del 1 de febrero del 2022.
Ante esta decisión la Oficina de Derechos Humanos de la ONU estableció que la vacunación obligatoria debía tener “razones sanitarias legítimas” y cumplir con ciertos requisitos
La portavoz Liz Throssell, comentó que la decisión de una vacunación obligatoria debe cumplir con ciertas condiciones que están establecidas en el derecho internacional, y las medidas deben objeto de una ley.
Agregó que las medidas deben ser proporcionales a los intereses que están en juego y a la meta que se persigue, y deben ser lo menos intrusivas posibles. Además de que las medidas no deben ser discriminatorias.
A pesar de las recomendaciones, la portavoz recalcó que los gobiernos deben hacer todos los esfuerzos a su alcance para promover la vacunación voluntaria.
Con información de: lopezdoriga.com