Diego López Bernal.-
Cd. Victoria, Tam.-
Con una población de cuatro mil personas en cinco centros penitenciarios, Tamaulipas participó en la Encuesta Nacional de Población Privada de la Libertad 2021, que elabora el Inegi, en la que destaca que el 48.6 por ciento en todo el país recibió agresiones físicas al momento de su detención.
Sobre los datos específicos de nuestra entidad, el estudio del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi) revela que el 21.9 por ciento de los reclusos son reincidentes, es decir, señalaron haber sido sentenciados por algún delito de manera previa a su reclusión actual.
El delito de mayor reincidencia en el país es el del robo, con 57.5 por ciento, seguido de la posesión ilegal de drogas, con 11.9 por ciento, y la portación ilegal de armas, con diez por ciento; los ladrones de automóviles son los que más llegan a las cárceles.
Más datos; sobre las condiciones de los reos en Tamaulipas el 10.1 por ciento de ellos aseguran sentirse inseguros al interior de su celda, por debajo de la media nacional, que es del 25.9 por ciento; la entidad con cárceles con mayor percepción de inseguridad fue Campeche, con un 43.6 por ciento.
Asimismo, un 15.6 por ciento de los reclusos en nuestra entidad aseguraron haber sido víctimas de al menos un delito al interior del centro de reclusión, condición que a nivel nacional llega al 34.1; el Estado de México lidera este apartado, con un porcentaje de 47.5.
Por otra parte, 36.2 por ciento de los reos mexicanos aseguraron haber sido víctima de un acto de reclusión, condición que en Tamaulipas se reduce a dos de cada diez detenidos, abunda el estudio estadístico del Inegi presentado este martes.
El 15 por ciento de las personas privadas de su libertad en Tamaulipas aseguraron ser víctimas de actos de corrupción al momento de su detención; el 9.9 por parte del Ministerio Público; el 3.7 durante el proceso judicial y 3.6 en el centro de reclusión.
RESULTADOS NACIONALES
Entre los resultados más significativos de esta encuesta destaca que el 48.6 por ciento de la población privada de la libertad recibió agresiones físicas al momento de su detención; de ellos, el 38.4 señaló haber recibido patadas o puñetazos por parte de la policía o autoridad que la detuvo, mientras que 23 por ciento mencionó haber sido asfixiada o ahorcada.
Por otra parte, el 15.5 por ciento de la población de mujeres que sufrió agresiones físicas señaló haber recibido agresiones sexuales por parte de la policía o autoridad que la detuvo y el 4.8 fue víctima de violación sexual durante su detención, abunda el Inegi en su informe.
También revela que 27.8 por ciento de la población privada de la libertad está en proceso de recibir sentencia; de esta población, 39.2 por ciento lleva dos años o más al interior de un centro penitenciario, mientras que 24.8 ha estado recluida entre uno y dos años.
Asimismo, detalla que de la población privada de la libertad que ha recibido sentencia el 29.8 por ciento fue condenada por homicidio y 12.2 por ciento por secuestro, mientras que la población sentenciada por robo se ubicó en 32.7 por ciento.
El Inegi señala que “la Encuesta Nacional de Población Privada de la Libertad 2021 ofrece información sobre las características sociodemográficas y socioeconómicas, el debido proceso y los delitos por los que la población privada de la libertad de 18 años o más fue procesada o sentenciada”.
“Además, busca conocer la vida intracarcelaria, la infraestructura de los centros penitenciarios, el acceso a servicios y bienes, las características de las relaciones sociales, en términos de violencia, entre la población interna y el personal que labora en los centros, los actos de corrupción, así como los antecedentes jurídico-penales y las expectativas de salida de dicha población”, consigna en su comunicado.
CONDICIONES EN LAS CÁRCELES
Este año el 5.8 por ciento de la población de mujeres privada de la libertad tuvo hijos menores de 12 años viviendo dentro del centro penitenciario; de ellas, 96.6 por ciento declaró que sus hijos nacieron durante su reclusión y el 81.5 señaló que el centro penitenciario proporcionó vacunas a los menores.
También destaca que el 22.2 por ciento de la población carcelaria estudiaba para obtener un nivel escolar; de los que no estudiaron el 19.7 señaló que no lo hacía por falta de tiempo y 15.4 mencionó no querer o no estar interesado.
Por último, se informó que a nivel nacional el 71.2 por ciento de la población privada de la libertad realizó alguna actividad laboral en el centro penitenciario; de ellas, 46.5 llevó a cabo labores artesanales y 9.1 realizó actividades de servicios personales.
