El proyecto estadounidense Viromusic hizo temas musicales basados en el código genético del COVID-19. Hasta ahora, han logrado extraer 10 mil melodías individuales.
Las piezas son resultado de un proceso que sus autores denominan «sonificación del ADN», en el que cada letra del código del virus se convierte en una nota musical y luego un algoritmo de un ‘software’ creado por ellos mismos busca las secciones que mejor suenen, musicalmente hablando.
Una estación de audio digital las convierte en música, que es arreglada con acompañamientos interpretados por músicos profesionales que tocan instrumentos como violonchelos, guitarras, bajos o sintetizadores, entre otros.
