Kemba Walker firmó este sábado el primer triple doble de un jugador de los New York Knicks en la jornada navideña de la NBA, liderando el triunfo 101-87 ante los Atlanta Hawks.
Walker, quien no contaba para el técnico Tom Thibodeau apenas una semana atrás, logró 10 puntos, 10 rebotes y 12 asistencias en 40 minutos de juego.
Para el base, cuatro veces All-Star, fue el tercer triple doble de su carrera y el primero desde el 4 de abril de 2014.
También es el primer jugador en lograr esta marca con el uniforme de los Knicks el día de Navidad y el séptimo en toda la historia de la NBA, después de Draymond Green (2017), Russell Westbrook (2013), LeBron James (2010), Billy Cunningham (1970), John Havlicek (1967) y Oscar Robertson (1967, 1963, 1961 y 1960).
Los aficionados del Madison Square Garden de Nueva York celebraron por todo lo alto cuando el base capturó su décimo rebote, sellando el triple doble, a falta de seis minutos para el final. «Me sentí de vuelta en casa», dijo el base del Bronx sobre el apoyo del público. «Soy de aquí. Hoy me mostraron mucho amor.
Solo quería salir aquí y tener una oportunidad». La actuación de Walker, de 31 años, capturó la atención de un partido que la NBA incluyó en su menú navideño esperando el regreso del talentoso y descarado Trae Young (Hawks) al Madison, donde en los pasados playoffs se convirtió en uno de los villanos favoritos del público.
Young, sin embargo, se encuentra en la lista de las estrellas que se perderán la jornada debido al impacto de la pandemia de covid-19, que también incluye a Kevin Durant y Kyrie Irving, de los Brooklyn Nets, y Luka Doncic, de los Dallas Mavericks.
Además de Young, los Hawks también sufrieron las ausencias de piezas importantes como Kevin Huerter o Danilo Gallinari y se vieron superados desde el principio por los Knicks. Delon Wright y John Collins anotaron 20 puntos cada uno para Atlanta mientras el ala-pívot Julius Randle terminó con 25 puntos y 12 rebotes para los Knicks.
A dos minutos del final, los aficionados volvieron a ponerse en pie cuando Kemba Walker enfilaba el camino del banquillo.
El base sigue reivindicándose después de que Thibodeau lo dejara fuera de la rotación durante nueve partidos por el mal rendimiento del equipo. Hace una semana el técnico tuvo que repescarlo por las numerosas bajas por covid-19 y el base ha respondido con cuatro grandes actuaciones, especialmente sus 44 puntos del jueves ante los Wizards.
Con esta derrota, los Hawks caen a la posición 11 de la Conferencia Este, fuera de las plazas del play in a playoffs, con los Knicks un lugar por detrás.
