Alfredo Guevara.-
Cd. Victoria, Tam.-
La política económica del Gobierno de la República ha generado una inflación descontrolada, la pérdida del salario real, la caída del poder adquisitivo en plena cuesta de enero, aseguró Jorge Alfredo Lera Mejía.
Es decir, sigue sumergida en una “grave” crisis y fallas la Cuarta Transformación (4T), cuya política económica no permite la recuperación de salarios, tampoco genera empleo ni formal o informal, expuso el Vicepresidente de la Liga de Economistas Revolucionarios (LER).
Derivado de la situación anterior, el poder adquisitivo de la mayor parte de la población de clase media y hacia abajo es insuficiente, porque aun con el recién aumento autorizado por la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami), la inflación del país ya lo superó.
El representante de la LER en la zona noreste del país señaló que “por más becas y remesas que envíen nuestros connacionales desde alguna parte de los Estados Unidos o el extranjero, sigue estando en una encrucijada la economía en esta cuesta de enero”.
Tras hacer un análisis sobre el alza de la inflación que registra el país, Lera Mejía afirmó que la política económica de la Cuarta Transformación no genera empleo, tampoco ingresos y menos salarios reales.
Por el contrario, aseguró que el Gobierno de la República sigue siendo subsidiado y asistencialista, lo que provocará que los índices de pobreza vayan en aumento, como ha sucedido en los últimos tres años en el país.
Citó el economista, académico de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT), que el Gobierno federal se ha enfocado más en pagar becas a los “ninis”, las denominadas “Benito Juárez”, “Jóvenes Construyendo el Futuro”, como a los adultos mayores.
Caso contrario, en lo que va de la administración federal no ha destinado, dentro de su modelo económico, ninguna clase de apoyo al sector productivo, sobre todo a las pequeñas y medianas empresas.
Lejos de mejorar, insistió en que México sigue teniendo una grave crisis económica, al registrar niveles de inflación muy elevados y en el peor de los casos, disminuyendo el Producto Interno Bruto (PIB).
