En Inglaterra un hombre llamado Simon Cook construyó una ventana en su casa que da directamente al cuarto de sus vecinos, quienes se quejaron y hasta llevaron el asunto a los tribunales.
La historia no termina ahí, pues Cook también colocó un maniquí que ‘mira’ por la ventana.
La pareja asegura que se ven obligados a vivir en la “oscuridad” con las cortinas cerradas.
En la corte, los vecinos alegaron que se desvisten detrás de un librero, el único lugar en donde no podían ser vistos.
A pesar de los reclamos, el juez dictaminó que Cook no había violado las reglas de planificación al instalar una ventana que se podía abrir sin vidrio esmerilado.
Aunque el vecino ya quitó el maniquí, la pareja asegura que están pensando en mudarse después de haber vivido 27 años en esa casa.
Con información de: noticieros.televisa.com