Agencias.-
El paso del tiempo, a veces, no se siente en el cuerpo debido al ritmo de vida que tenemos, sobre todo al llegar a los 30 años, que es cuando algunas personas suelen no sentir el cambio por la juventud que aparentemente sienten aún, pero el cuerpo sí lo siente y nota los cambios.
En este contexto, la alimentación tiene que variar en la medida en que uno envejece, pues los alimentos que se debían consumir en la infancia eran diferentes a los de la adolescencia, por el simple hecho de que el cuerpo tiene diversas necesidades, ya sea a nivel de nutritivo, vitamínico o energético.
Aquí es donde entra en juego esa lista de los alimentos que hay que evitar al llegar a los 30; si bien no se trata de eliminarlos definitivamente, es recomendable consumirlos en menor cantidad por la naturaleza de estos.
PASTA
Mucha gente ama este platillo por las diversas opciones en que se puede preparar y lo fácil que es hacerlo, sin embargo, será mejor reducir su consumo, ya que la pasta son carbohidratos procesados y refinados, así mismo, contiene niveles glucémicos muy altos. Abusar de ella podría provocar aumento de peso, pues sería mayor el riesgo de diabetes y de enfermedades coronarias.
MARGARINA
Erróneamente se cree que la margarina es más saludable que la mantequilla y, por eso, muchas personas han decidido sustituir una por otra, esto es falso debido a que existen grasas trans en muchas margarinas, en su lugar se podría usar aceite de oliva en crudo, que es más sano, o regresar a la mantequilla que es un poco más natural y regular su consumo.
PAN BLANCO
Quizá no es sorpresa para algunos que comer este tipo de pan no es saludable, ya que al estar compuesto por almidón, principalmente, su consumo no es recomendable, pero siempre existe la opción de sustituirlo por pan integral elaborado con grano entero.
YOGUR CON FRUTA
Esta clásica combinación puede no ser del todo una buena opción, pues es demasiada azúcar, ya que el yogur contiene -al menos- 24 gramos de azúcar, más la que contenga la fruta. Aunque a muchos les gusta comerlos juntos, lo ideal es no hacerlo, pues al consumir tanta azúcar se acelera el proceso de descomposición de la piel, reduciendo la producción de colágeno y elastina.
CARNES ROJAS
Existen muchos amantes de este tipo de carnes en todas sus presentaciones, pero este alimento no sólo aporta proteínas, sino grasas saturadas, lo cual puede reflejarse en el aumento del colesterol malo. Así mismo, consumirla fomenta la posibilidad de adquirir una enfermedad cardiaca; lo ideal es consumirla con moderación.