La caja del futbol está llena: la FIFA contempla llegar a unos ingresos récord de 7 mil millones de dólares (6.300 millones de euros) tras el Mundial de Qatar 2022 (21 noviembre-18 diciembre), a pesar de los efectos de la crisis del covid-19.
«No solo durante el año del covid (en 2020) la FIFA no registró pérdidas, no solo la FIFA alcanzó ya en marzo de 2022 su objetivo de ingresos de 6.4 millones de dólares (para el ejercicio 2019-2022), sino que alcanzará casi los 7 mil millones (de dólares) a finales de año», celebró el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, durante el Congreso anual del jueves en la capital catarí, Doha.
Si bien la pandemia del coronavirus redujo los ingresos a 266 millones de dólares en 2020, «la posición financiera de la organización sigue siendo sana y robusta, con reservas suficientes», indican las cuentas de la instancia.
Las finanzas son tan buenas, en realidad, que la FIFA ha gastado más de mil millones de dólares en medidas de lucha contra los efectos de la pandemia en el futbol y ha aumentado a la vez sus reservas de liquidez en un 21%, para alcanzar los 5.490 millones de dólares.
En 2021, la instancia, cuyos ejercicios financieros duran cuatro años, entre Mundial y Mundial, declaró ingresos de 766 millones de dólares.