diciembre 14, 2024
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abril 7, 2022 | 220 vistas

Diego López Bernal

Cd. Victoria, Tam.-
La sequía se extiende aceleradamente por el territorio tamaulipeco como cálidos brazos; al 15 de marzo solamente once de ellos la padecían, pero al término del mes pasado el calor abrasaba ya a 27, es decir, más de la mitad.

El avance de la sequía en Tamaulipas se aprecia en el grado de la condición en que se encuentran los municipios; en la primera quincena del mes pasado solo uno estaba en sequía extrema y al iniciar abril ya eran dos: Nuevo Laredo y Guerrero.

Por su parte, Ciudad Victoria se encontraba entre los 23 municipios en condiciones moderadas en el reporte del 31 de marzo del Monitor de Sequía del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), organismo dependiente de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).

En esta categoría, en la que se encuentra prácticamente la mitad del territorio estatal, están al arrancar el presente mes los municipios de Altamira, Abasolo, Burgos, Camargo, Cruillas, González, Güémez y Díaz Ordaz.

También se encuentran Hidalgo, Jaumave, Jiménez, Madero, Mainero, Mante, Padilla, Reynosa, San Carlos, San Fernando, San Nicolás, Soto la Marina, Tampico, Villagrán y, como ya se mencionó, esta Capital.

A ellos se suman con sequía severa los municipios fronterizos de Miguel Alemán y Mier, que sumados a los dos en condiciones extremas, son un total de 27 (los mencionados al inicio), por lo que solamente restan 16 para que la totalidad de la entidad con problemas de sequía.

Cabe recordar que la sequía extrema genera pérdidas mayores en cultivos y pastos, el riesgo de incendios forestales es extremo y se generalizan las restricciones en el uso del agua debido a su escasez.

La sequía severa implica probables pérdidas en cultivos o pastos, alto riesgo de incendios, es común la escasez de agua y se deben imponer restricciones en su uso.

En tanto que en la moderada se presentan algunos daños en cultivos y pastos; existe un alto riesgo de incendios, bajos niveles en ríos, arroyos, embalses, abrevaderos y pozos, se sugiere restricción voluntaria en el uso del vital líquido.

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