La metrópolis china de Shanghái ha registrado en las últimas horas más de 23 mil nuevos contagios de coronavirus para sumar 326 mil casos totales desde la eclosión, a principios de marzo, de un enorme brote de la variante ómicron del coronavirus que ha provocado el confinamiento de los 25 millones de habitantes de la ciudad.
Las autoridades sanitarias de la ciudad han confirmado que, de los últimos casos, un total de 13 fueron clasificados como «graves», si bien no tienen constancia de fallecidos.
La ciudad quedó completamente paralizada el 5 de abril, tras el fracaso de la cuarentena en dos fases a ambos lados del río Huangpu, Pudong y Puxi, en un cierre que ha provocado una grave escasez de alimentos y otros suministros esenciales, como han reconocido las propias autoridades chinas, sorprendidas por la agresividad de los contagios.
De hecho, las nuevas infecciones diarias han seguido aumentando desde el cierre total hasta batir doce máximos diarios en las últimas dos semanas, siempre por encima de los 20 mil contagios al día.