Es concebible que su entrenamiento después del trabajo no le esté sacando el máximo provecho. Para obtener los mejores resultados, siga estas sugerencias.
Si no tiene tiempo para hacer ejercicio por la mañana, un entrenamiento nocturno puede ser la única forma de adaptarlo a su apretada agenda. Sin embargo, antes de ir al gimnasio, asegúrese de que su nivel de energía esté en su punto más alto y que esté bien descansado. Estos consejos lo ayudarán a cumplir con su entrenamiento nocturno y aprovecharlo al máximo.
Directamente del trabajo, ve al gimnasio
Si planeas ir primero a casa y luego al gimnasio, es posible que estés demasiado cansado para hacer ejercicio. En lugar de regresar a casa, prepare su ropa de ejercicio y lleve su bolsa de deporte al trabajo. Será más probable que se ciña a su entrenamiento si lo hace de esta manera. Si tienes que pasar tiempo en casa antes de ir al gimnasio, no lo desperdicies charlando o recostado en el sofá. Cámbiate de ropa, refréscate y muévete.
Conozca sus máquinas
El entrenador elíptico, la caminadora, la bicicleta de interior, el press de banca y la prensa de piernas son dispositivos típicos en la mayoría de los gimnasios. También tienen diferentes tipos de equipos de ejercicio, pero debes saber cómo utilizarlos correctamente para aprovechar al máximo tus ejercicios. La cinta de correr, por ejemplo, es excelente para HIIT porque te permite pasar de un ritmo bajo a alto, mientras que la elíptica es ideal para personas con problemas en las articulaciones. Sin embargo, solo puede beneficiarse de ellos si sabe cómo utilizarlos correctamente. Así que no tengas miedo de pedirle ayuda a tu entrenador.
Planifique su alimentación con anticipación
Comer una gran cena y luego ir corriendo al gimnasio puede causar problemas intestinales y mermar su vitalidad. Como resultado, asegúrese de hacer ejercicio al menos dos horas después de la comida. Además, nunca debe hacer ejercicio con el estómago vacío, así que tome un puñado de bocadillos media hora antes de comenzar. Una pequeña banana, un trozo de pan multicereales o un puñado de almendras, según la nutricionista Priya Kathpal, podrían ser exactamente lo correcto.
Obtenga mucha agua.
Cuando estás deshidratado, tus niveles de energía bajan y eres más propenso a sufrir calambres, lo que puede dificultar tu entrenamiento. Así que bebe mucha agua a lo largo del día, así como antes y después de tu entrenamiento. No solo te sentirás enérgico, sino que también podrás rendir al máximo. Comprueba si necesitas beber agua entre series.
Mezcle un poco las cosas
Podría aburrirse si solo practica un tipo de ejercicio, lo que podría ser una de las razones por las que no va al gimnasio con regularidad. Como resultado, incluya varios tipos de entrenamiento aeróbico y con pesas en su entrenamiento. Esto no solo te ayudará a quemar grasa, sino que también te ayudará a tonificar tus músculos. También puedes probar otras actividades como zumba, spinning, yoga e incluso deportes de equipo una vez a la semana.
