Alfredo Guevara.-
Cd. Victoria, Tam.-
La única manera de que las presas recuperen el nivel de almacenamiento de agua óptimo, para consumo humano y el riego de cultivos, es que llueva de manera atípica o nos llegue un huracán por el Golfo de México.
El director de Distritos y Unidades de Riego en la Comisión Estatal del Agua (CEAT), Efraín Honorato Nieto, destacó que no obstante las condiciones críticas de las presas en el norte del estado, con excepción del Distrito 025, en los demás se pudo regar con agua que se disponía.
Sin embargo, las principales presas de la entidad requieren de abundantes lluvias, cuyos escurrimientos eleven los niveles que registran para ir programando los riegos para la siembra y desarrollo vegetativo de la producción, sobre todo en la zona norte.
“Ya empezó la temporada de huracanes, confiamos en que de aquí al mes de noviembre que concluye, nos llegue un huracán o ciclón por el Golfo de México, cuya cantidad de agua mejore los niveles de las presas, porque sí, hay algunas que necesitan de ese líquido”, explicó.
Honorato Nieto dijo que no hay otra opción para resolver esta problemática, que no la consideró grave, como sí la tienen otras entidades del país, cuyas fuentes de abastecimiento para consumo humano, se agotaron.
Y aun cuando se han registrado lluvias esporádicas y en algunas ocasiones focalizadas, como ha sucedido en municipios de la zona norte de la entidad, permitieron el desarrollo de la plantación de sorgo y maíz, sobre todo en la zona de temporal.
“Con excepción del Distrito de Riego 025 que no se regó, el resto se alcanzó riego de las presas, todo lo demás tuvo un desarrollo por el agua de lluvia que cayó en la mayor parte de la zona norte de la entidad”, insistió el Director de Unidades y Distritos de Riego de la CEAT.
Por tanto, no descartó que en algunas zonas de sembradíos el rendimiento de los granos sea menor que en otros.
Recordó que la mayor parte de la superficie que se siembra en el ciclo otoño-invierno en el norte de la entidad es de temporal, en tanto que el resto superficie de riego, con el agua que disponen las presas.