José del Carmen Perales Rodríguez
Para amortiguar el impacto que tendrá el inminente incremento al precio de la tortilla a nivel nacional, el sector restaurantero comenzó a recurrir a fabricar ese producto para reducir los costos y prepararse para una nueva embestida inflacionaria.
Pablo Reyna Quiroga, vicepresidente de afiliaciones de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac), adelantó lo anterior y confirmó que el precio de la harina de maíz registrará un aumento escalonado en lo que resta del año.
«Empresarios del ramo agrícola que se dedican al comercio de granos entre ellos el maíz, nos han confirmado que viene un golpe fuerte en el precio de este producto, incremento que podría ser hasta del 20 por ciento y se aplicará de forma escalonada en lo que resta del año», adelantó.
Reyna Quiroga agregó que esa alza inevitablemente se reflejará en el costo final de la harina, que es el insumo que determinará el incremento del kilogramo de tortilla y que anticipó vendrá a impactar no sólo a ese sector, sino a la población en general.
«Para nosotros es un insumo que si bien podemos sustituir mediante algún proceso, en ocasiones no ocurre lo mismo en los hogares que tienen la tortilla como parte fundamental de su dieta y que inevitablemente resentirán los efectos en la economía familiar», agregó.
En ese contexto, el empresario restaurantero agregó que para sortear el impacto del alza, cada vez más establecimientos están optando por fabricar sus propias tortillas para reducir costos, además de tener un mayor control sobre el consumo de este producto.
«Sabemos que hay más restaurantes que están adquiriendo equipo para elaborar tortillas, es una opción que se tiene y a la que se está recurriendo, de esta forma se están preparando para cuando se registre el aumento antes de fin de año», concluyó.
