Fernando Valero Salinas.-
Cd. Victoria, Tam.-
Usuarios de la Central de Autobuses de Ciudad Victoria denunciaron el mal estado en que se encuentra el acceso principal a dicha terminal, el cual, además, fue acaparado por los operadores de taxi de sitio.
En un recorrido por el lugar, El Diario de Ciudad Victoria pudo constatar el deterioro que presenta el carril de ascenso y descenso de los usuarios de la terminal de autobuses.
Dicha vialidad, que se encuentra dividida en dos carriles por barras de concreto desmoronándose, tiene enormes baches que dificultan el tránsito de los vehículos.
Y por si fuera poco, los particulares que acuden para dejar o recibir a familiares se ven forzados a pagar estacionamiento, aun cuando solo deban detenerse por unos minutos.
Esto se debe a que los prestadores del servicio de taxi literalmente acapararon el carril que se encuentra en mejores condiciones.
Automovilistas y usuarios fueron quienes reportaron a nuestra casa editora el mal estado en que se encuentra la vialidad, que está ubicada justo en las puertas que dan al interior de la Central de Autobuses de esta Ciudad Capital.
En el recorrido observamos y registramos que los topes o reductores de velocidad se encuentran ya desmoronados y en los cuales ya se aprecian las varillas de su estructura interior.
Al entablar un diálogo con personas que en ese momento llegaban a dicha terminal, no dudaron en expresarnos sus puntos de vista.
“Mire, para nosotros los usuarios está en muy malas condiciones, o sea los huecos parecen cráteres, sí es intransitable, tiene que ir uno muy despacio para transitar, y esto pensé que correspondía al Municipio, pero no, es zona particular de la Central”, dijo el señor Jesús.
“Está en pésimas condiciones, no se puede caminar bien, muchos baches y aparte con las varillas de fuera también es un riesgo, tanto para cualquier persona que puede tropezar y caer y gente con discapacidad difícilmente van a poder caminar por aquí, lamentablemente está así, no sé a quién le corresponderá que le den una manita de gato para que lo puedan solucionar”, mencionó José Antonio Reyes Mendoza.
“Con muchos baches, con obstrucción se batalla para transitar aquí, definitivamente sí está en muy malas condiciones todo ‘bachiento’ y está obstruido, no hay buena circulación y se te dañan los vehículos”, consideró la señora Sarahí Ruiz.
Finalmente, los automovilistas o usuarios piden a la administración de la Central Camionera que reparen este pequeño tramo de vialidad a fin de evitar que sus vehículos se vean afectados o dañados en su suspensión o neumáticos.
Como parte de la cobertura informativa buscamos a los administradores de la Central de Autobuses, quienes no se encontraban en la gerencia.
“No sabemos cuándo va a regresar y apenas él (el gerente) es quien puede proporcionar información a los medios de comunicación”, nos comentó una trabajadora.
SUCIA Y MAL OLIENTE
Otros usuarios entrevistados en la Central se quejaron de que la sala de espera y la zona de andenes regularmente se encuentran sucias y con olores desagradables.
Lamentaron el abandono en que se encuentra el inmueble, que diariamente recibe a cientos de viajeros, quienes parten a distintos destinos o bien llegan a la Capital.
Los entrevistados coincidieron que deberían ser las autoridades locales las que se hagan cargo de dar mantenimiento a la Central de Autobuses, misma que no es digna de una Capital como Ciudad Victoria.
EL PLEITO
Fue a mediados del pasado mes de abril cuando taxistas de la Central de Autobuses, agremiados todos al Sindicato de Trabajadores, Operadores y Concesionarios de Automóviles de Alquiler (STOCAA), anunciaron que a partir de esa fecha ya no permitirían que los vehículos de las plataformas Uber y Didi entraran al pequeño acceso a recoger o dejar pasaje.
El motivo: eran una competencia “desleal” para ellos, quienes pagaban y pagan una cantidad cercana a los 35 mil pesos mensuales al administrador del inmueble por dejarlos prestar sus servicios.
Incluso, amenazaron con tomar medidas como el uso de la fuerza, si los operadores de Uber o Didi “se atrevían” a entrar a ese “territorio”.
“Las medidas ya las planteamos ante Transporte y nos han dicho que la empresa esa es muy grande, el Didi y el Uber, pero la cuestión es que si no nos hacen caso, las medidas las vamos a tomar nosotros”, decía el secretario general del STOCAA, Guadalupe Navarro.
Y cumplieron, pues las ya mencionadas barras de concreto son removidas al antojo de los taxistas, dejando libre un carril para autos particulares (No Uber ni Didi), lleno de baches y que da un muy mal aspecto.
EL ENTORNO
A la paupérrima imagen que tiene la Central de Autobuses de Ciudad Victoria se suma el entorno, con carretones abandonados y locales cerrados por la calle Berriozábal, donde, por cierto, muy seguido aparecen fugas de drenaje que dejan un olor pestilente a lo largo del día, sobre todo cuando las temperaturas son muy altas.
Mientras que por el bulevar Fidel Velázquez, si bien hay “más vida” al concentrarse vendedores de diversos alimentos y productos, además de ser el paradero de las rutas de microbuses, la imagen no es tan diferente de la que ofrece por el frente, una postal indigna de la Capital de Tamaulipas.
