abril 25, 2024
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agosto 1, 2022 | 119 vistas

Diego López Bernal.-

Cd. Victoria, Tam.-
El 2021 se aproximaba a cerrar el primer semestre y el gas licuado de petróleo aumentaba desmedidamente; la situación llevó al Gobierno de la República a tomar una medida emergente y el uno de agosto comenzó el control de precios.

Ese día, hace exactamente un año, la Comisión Reguladora de Energía (CRE) dio a conocer el primer aviso a los permisionarios (empresas gaseras) sobre los precios máximos que podían aplicar en la venta del energético, tanto en litros como en kilogramos.

En esta última modalidad se fijó en 21.85 pesos la unidad para Ciudad Victoria y la región; 12 meses después el precio es de 23.89 pesos por kilogramo, es decir, 2.04 pesos más lo que implica pagar 91.80 pesos más por el llenado de una tanque de 45 kilogramos o 61.2 por el de 30.

Un año después la pregunta es: ¿Funcionó el control de precios? De acuerdo a la CRE, “en relación con el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), en el periodo no regulado de precios de gas LP (que comprende de 2017 a 2021) en general se observa una variación mayor en el precio del gas LP que en el INPC”.

Lo anterior significa que el energético siempre aumentó más que la inflación anual en los cuatro años previos al inicio de la regulación de los precios, por parte del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, lo cual se ha mantenido en la misma tendencia.

La medición oficial más reciente del INPC indicó que la inflación anual en el país es de 8.16 por ciento en tanto que el gas aumentó en la Capital de Tamaulipas hasta 24.94 pesos al cierre de la primera quincena de julio, lo que significa un 14.14 por ciento de aumento desde el uno de agosto del 2021.

Al dar a conocer los precios para la semana del 31 de julio al 6 de agosto se estableció un límite de 23.89 pesos por kilo, por lo que desde los 21.85 del uno de agosto de 2021 la inflación anual del gas, ya bajo la regulación de precios, será de 9.33 por ciento, más de un punto porcentual de la inflación general del país que en la primera quincena de julio fue de 8.16 por ciento.

De esta manera, se corrobora que el aumento en los precios del gas que se usa en la mayoría de los hogares mexicanos se mantiene con una variación mayor en el energético que en el INPC, como fue una de las aseveraciones publicadas en julio de 2021 en el Diario Oficial de la Federación.

Particularmente, en el “acuerdo que establece la regulación de precios máximos de gas licuado de petróleo objeto de venta al usuario final”, la CRE señaló lo siguiente: “…se esperaría que, de consolidarse el nuevo esquema de mercado, los aumentos en concurrencia a nivel regional den al mercado mayor capacidad de respuesta ante los movimientos de los precios internacionales, y puedan reflejar la caída de los precios internacionales”.

La realidad es que el gas es más caro 9.33 por ciento en Ciudad Victoria que en al arrancar agosto del 2021, por lo que los consumidores pagan 91.80 pesos más por el llenado de una tanque de 45 kilogramos o 61.2 por el de 30.

AÑO DE CONTRASTES

Los archivos de El Diario de Ciudad Victoria, que ha dado puntual seguimiento a la regulación y a la variación de los precios de gas en esta Capital y en general en Tamaulipas muestran datos interesantes, que a continuación se analizan en la búsqueda de una respuesta al cuestionamiento de si ha funcionado el control de precios del Gobierno federal.

Durante los tres primeros meses de la regulación de esquema de mercado del gas los aumentos fueron la constante; para llegar al precio récord de este año, que se estableció el 31 de octubre, solamente se dieron tres reducciones semanales, mientras que los aumentos fueron diez semanas.

El primer trimestre controlando los precios no resultó favorable de manera alguna pues el energético aumentó 25.85 por ciento, desde 21.85 pesos por kilogramo que costaba el uno de agosto hasta los 27.50 del día último de octubre; la inflación nacional anual entonces era de 6.24 por ciento.

A partir de entonces el Gobierno federal comenzó a aplicar drásticas reducciones semanales, registrando cuatro superiores al peso por kilogramo (por lo general, la variación es de centavos) lo que llevó a contar con el récord del precio más bajo del primer año del control; el dos de enero se podía vender máximo en 21.56 pesos el kilogramo.

Es decir, por primera vez desde el uno de agosto del 2021 se podía comprar el gas más barato que en esa fecha, con una reducción en términos de porcentaje de 1.32 por ciento y de 0.29 centavos en el precio por kilogramo; esta fue la excepción a la regla.

A partir del domingo nueve de enero los precios aumentaron seis semanas, bajaron el 20 de febrero y volvieron a subir tres semanas consecutivas más; para el 13 de marzo el precio ya era de 26.54 pues ese fin de semana se dio el incremento récord semanal de 1.44 pesos.

Vinieron otras seis semanas de reducciones, acumulando 74 centavos por kilogramo, para terminar el mes de abril con un precio 25.80 continuando con rachas semanales más prolongadas de descensos que de aumentos para llegar este 31 de julio al precio de 23.89 pesos por kilogramo, lejos de los 27.50 del récord máximo pero también de los 21.56, el tope mínimo en este primer año de control del gas LP en nuestro país.

SEGUNDO AÑO Y RECONFIGURACIÓN DE REGIONES

Este sábado 30 de julio la CRE dio el aviso número 52 desde que inició la regulación de precios del gas LP en el país y la novedad más significativa en el primer aniversario es una reconfiguración de las regiones energéticas en las que se distribuyen los municipios de Tamaulipas.

Hasta la semana pasada esta era la integración de 43 municipios a las regiones energéticas, en donde se destacaba que los municipios con mayor pobreza tenían los precios más altos y los de más desarrollo pagaban los más bajos, no solo del estado, sino de todo el país.

En la región 32 se encontraba únicamente el municipio de Díaz Ordaz; en la 43 los de Abasolo, Casas, Güémez, Hidalgo, Jaumave, Jiménez, Llera, Mainero, Padilla, San Carlos, Soto la Marina, Victoria y Villagrán.

Asimismo, la región 33 estaba integrada por Matamoros, Reynosa, Río Bravo y Valle Hermoso, siendo la de precios más bajos del país, pero en Tamaulipas la región 36, con Bustamante y Miquihuana, pagaba los precios más altos.

Otra región que solo tenía un municipio de Tamaulipas era la 40 de Nuevo Laredo; en la 44 estaban Burgos, Cruillas, Méndez, San Fernando y San Nicolás, mientras que en la 45 Camargo, Guerrero, Mier y Miguel Alemán.

La región 62 era la segunda de mayor cantidad de municipios (solo superada por la 43) y en ella estaban Antiguo Morelos, Gómez Farías, El Mante, Nuevo Morelos, Ocampo, Palmillas, Tula y Xicoténcatl; por último la 104 estaba integrada por Aldama, Altamira, Ciudad Madero, González y Tampico.

A partir de este 31 de julio los 43 municipios tamaulipecos se distribuyen de una nueva manera: en la región 135 estará solamente  Burgos; en la 186 se incluye a Abasolo, Jiménez y Ciudad Madero, en tanto que Antiguo Morelos, El Mante, Gómez Farías, Llera, Nuevo Morelos y Xicoténcatl integran la región 188.

Aldama y González están en la 189; Guerrero, Mier y Miguel Alemán en la 190 y Nuevo Laredo seguirá solo en una región, en este caso la 191; Camargo, Díaz Ordaz, Matamoros, Reynosa, Río Bravo y Valle Hermoso ahora estarán en la 192, mientras que Cruillas, Méndez, San Fernando y San Nicolás en la 193.

Por último, en la región 194 se ubica a Altamira y Tampico; en la 195 a Bustamante, Jaumave, Miquihuana, Ocampo, Palmillas y Tula; cierran la geografía tamaulipeca los municipios de Casas, Güémez, Hidalgo, Mainero, Padilla, San Carlos, Soto la Marina, Victoria y Villagrán, que estarán en la región 196.

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