noviembre 28, 2024
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La radio en Victoria

agosto 8, 2022 | 390 vistas

Por Francisco Ramos Aguirre.-

Las ideas para hacer más amena la radio y generar identidad local estuvieron a la orden del día.

En uno de los ejemplares del periódico La Atalaya de los años cuarenta, el director Herculano Macías propuso a Elizalde transmitir dominicalmente programas de aficionados para alentar y promover el talento de artistas locales.

Este modelo funcionaba muy bien en la XEW y radiodifusoras de Monterrey, lo cual permitió captación de nuevas audiencias, involucrar a la familia y promover una cartera de patrocinadores de productos de consumo doméstico. En consecuencia, la difusora se benefició con ingresos para sostener su economía.

Durante varios años, la XEBJ promovió artistas locales con verdaderas aptitudes para figurar en el ámbito profesional. Por ejemplo, Paco Ordorica, Estrellita Galindo, Carmen La Tamaulipeca, Los Hermanos Guillén, Asunción Carrizales -La Alondra Tamaulipeca – creadora de un comercial de Café Margarita, Rafael Portillo, Fidel Cepeda, Los Hermanos Calderón, Pedro Castro Varela, Goyo Pérez, Roberto Ponce, Los Compadres, Dueto Valdez Palomo, Hermanos Flores, Chero Fuentes, Orquesta Príncipes de Swing, Conjuntos Siboney y Camagüey, Nacho Zamora, Hermanas Ibarra Malibrán, Alicia Miranda, Hermanos Tirado y Ernesto de Llano y Ricardo Castañón -pianistas-.

El enlace de programas a control remoto fue toda una novedad. El 17 de abril de 1945 se transmitió por la BJ desde Salones Alianza el cierre de un festival artístico de aficionados.

Luego de seleccionar los tres primeros lugares del concurso y entregarles premios en efectivo, se realizó un “soberbio baile.” Poco después surgió La Hora de los Aficionados, con la asistencia de numerosos cantantes y músicos en ciernes, quienes se forjaron profesionalmente.

Ese mismo año nació el programa de concursos Mueblería La Malinche, con premios a la madre más prolífica, más anciana y la mejor composición literaria.

En 1946, se escuchaba La Hora de México todos los lunes por la XEBJ 1450 kilociclos a las ocho y media pm, patrocinado por la fábrica de muebles de oficina H. Steele.

Quienes actuaban en estos programas firmaban contrato y eran considerados artistas exclusivos. En esa frecuencia se escucharon los cantantes Mercedes Carasa, Pasquale Ferrara y J. Balcels Planas.

Lo mismo actuaron intérpretes famosos de la talla de Pedro Vargas, Los Bocheros, Tex-Mex, Cuca La Telefonista, Celeste Grijo y Poncho D’Alessio.

LAS CANCIONES DE AQUELLA ÉPOCA

En los años cuarenta y cincuenta, existieron momentos estelares para la canción mexicana en sus diferentes géneros. El cine, desarrollo de la industria discográfica, centros nocturnos y la radio son los principales factores para su desarrollo.

Las músicas que los victorenses escuchaban en aquella época, eran variadas y aún permanecen en el imaginario colectivo. Sobre todo en lo que se refiere al gusto de sus habitantes por el baile, bajo la ejecución de importantes orquestas nacionales por ejemplo Acerina, Carlos Campos, Mariano Mercerón, Luis Alcaraz, Pablo Beltrán Ruiz, Los Churumbeles de España, Tampico, Gatos Negros, Montecarlo y otras que se presentaron en los bailes de graduación organizados en la Alianza, El Casino, Unión de Filarmónicos y sobre todo por las escuelas de Tamatán, Normal de Tamaulipas, Industrial y otras.

Su influencia irradió en Victoria donde se integraron conjuntos y orquestas de músicos reconocidos, por ejemplo Victoria de Nacho Zamora, Príncipes del Swing, Orquesta de Rudy Varela y Siboney y Camagüey.

Sobre las canciones de moda de la época dorada en la primera mitad del siglo pasado, destacan: Flores Negras y Frenesí -Las Hermanas Águila-; Amor de Mis Amores, Sueño Guajiro y Solamente una Vez -Agustín Lara-; Nocturnal y Qué te Importa -Daniel Santos-; Incertidumbre y Cien Años -Hermanos Martínez Gil-; Perfidia -Raúl Shaw Moreno-; Amor Perdido; -Manolita Arriola- quien actuó en Tampico en los años cuarenta.

Falsa -Dora Luz-; Que te Importa -Rafael Hernández-; Reconciliación -Alfredo Núñez de Borbón-; Nochecita -Víctor Huesca; Irresistible -Pedro Flores-; Mis Noches Sin Ti -Genaro Salinas-;  Muñequita Mía -Rafael Kráymen-; Acércate Más -Oswaldo Ferrés-; Óyelo Bien -Abel Domínguez-; Noche de Luna de Xalapa -Juan S. Garrido- y otras.

En la década de los cincuenta logró fama el programa Peso por Palabra, patrocinado por Café Rico. Se transmitía los domingos a las once y media de la mañana: “En el que todos pueden concursar y ganar dinero, además presentaremos música alegre para su deleite”.

En abril de 1954 logró fama el programa El Caballero de la Noche, que se transmitía todos los días a las ocho de la noche con variedad temática al gusto de todos los públicos.

Por ejemplo Música de la Frontera -con guitarras y acordeones-, Congreso Médico con los Principales Médicos de la Ciudad amenizado con música clásica de la pianista Luisa Casas Irebién, Escuela Leona Vicario, candidata estudiantil de la Escuela Normal y el PRI.

Los programas radiofónicos de cocina dirigidos a las reinas del hogar estaban presentes de lunes a viernes por la mañana en la XEBJ. Uno de ellos era Sal, Pimienta y Amor se transmitía a las once y cuarto, poco antes del mediodía. Lo patrocinaba la grasa o manteca vegetal INCA “Especial Para Freír y guisar.”

Lo fuerte del Teatro Estudio fueron los festivales y concursos artísticos en vivo, con la participación de artistas locales. A principios de junio de 1955 desfilaron por sus micrófonos Chelo Cantú, Betty y Socorrito Garza “…quienes con el mismo entusiasmo de siempre, nos deleitaron con muy bonitas y populares canciones mexicanas. El dueto de estas jovencitas es un orgullo para Ciudad Victoria.

En el mismo programa actuaron Rafael Portillo y Ofelia Ramos; además se celebraron los concursos La Media Naranja y la Ruleta Berel.

Para en enero de 1956, la XEBJ se consolidó como la más importante en la localidad; para entonces, Elizalde tenía cuatro solares en la calle Matamoros Diez y Once.

Además de los adelantos técnicos modernos; en esos momentos el inventario consistía en un Teatro Estudio en construcción para 350 personas; cabinas y oficinas, clima de aire artificial, equipo de estudio RCA Víctor de alta fidelidad, piano de tres cuartos de cola y Solovox; micrófonos profesionales y grabadoras de cinta magnética “…de alta calidad que se produce en los Estados Unidos y se tiene y está mejorando una discoteca de música grabada en su mayoría en discos de larga duración… todo el mobiliario es metálico y las sumadoras y máquinas de escribir son eléctricas”.

Para su total terminación, el costo ascendió a medio millón de pesos, destinados a “…oficinas, estudios y cabinas de radiodifusión comercial…” Bajo estas circunstancias Elizalde solicitó al gobierno le otorgaran los beneficios, derivados de la Ley de Construcciones de Convivencia Pública.

(Continuará).

qrf

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