Leopoldo “N” policía municipal de Cuautitlán Izcalli fue detenido relacionado con la muerte del actor Octavio Ocaña, mientras otro más se encuentra prófugo. Este jueves una juez determinará su situación jurídica.
La detención de Leopoldo “N” de 45 años se realizó el martes cuando llegaba a cubrir su turno, mientras que Gerardo “N” también policía municipal no se ha presentado a trabajar, por lo que se llevó un cateo en su domicilio en donde tampoco fue localizado por lo que se considera prófugo.
El poder judicial del Estado de México confirmó que este jueves, se definirá la situación jurídica de Leopoldo “N” sobre su probable responsabilidad en el delito de homicidio ocasionado en agravio de Octavio Ocaña.
Mencionó que en la audiencia inicial de imputación por cumplimiento de orden de aprehensión, una jueza de Control del Poder Judicial del Estado de México con distrito en Tlalnepantla, calificó de legal la detención del imputado.
Por lo que impuso las medidas cautelaras de exhibición de garantía económica, presentación periódica ante el Centro estatal de Medidas Cautelares y portación de un localizador electrónico.
Añadió que de cumplirse podría seguir su proceso fuera de prisión, respetando el área de cobertura que se establezca con el brazalete.
De acuerdo con la semblanza de los hechos, el 29 de octubre de 2021, Octavio Ocaña, manejaba una camioneta Grand Cherokee, en compañía de David “N” y Jonathan “N”, y circulaba a exceso de velocidad sobre una vialidad de Cuautitlán Izcalli.
Los policías municipales Leopoldo “N” y Gerardo “N”, mediante sistema de radio parlante, le indicaron a Octavio “N” se detuviera, él hizo caso omiso y aumentó la velocidad. Ya en persecución, ambos vehículos arribaron a una vialidad de Atizapán.
Uno de los elementos de seguridad pública realizó detonaciones contra la camioneta de la víctima, quien llevaba un arma de fuego en la mano derecha.
Los policías impactaron el vehículo del actor en la parte posterior derecha e izquierda. El actor perdió el control y chocó contra un montículo de tierra, lo que causaría que él accionara el arma contra su cuerpo, y muriera, por lo que se considera homicidio por culpa.
