Alfredo Guevara.-
Cd. Victoria, Tam.-
Por daños y perjuicios detectados en la estructura del Hospital en Ciudad Madero, el consorcio conformado por la empresa Tesaulan y Grupo M3 enfrenta una demanda, confirmó Cecilia del Alto López, titular de la Secretaría de Obras Públicas (SOP).
Lo anterior, luego de que en el mes de abril se detectaran algunas grietas en columnas de dicho nosocomio, donde se levantó un dictamen para que un perito especializado en la materia hiciera una revisión y constatara el estado en que se encuentra la estructura del Hospital.
De acuerdo al resultado del estudio, la estructura no está en condiciones para continuar con los trabajos y, por consecuencia, debe ser reforzada debido a las malas prácticas de la contratista que en este caso tuvo bajo su responsabilidad la ejecución de los trabajos.
Por consecuencia, adelantó que será una de las obras que no se terminarán al término de la administración estatal, tras casi seis años de enfrentar litigios con diferentes constructoras, tomándose en cuenta que así se recibió al inicio de este gobierno la obra.
Explicó que en el 2016 el Gobierno recibió una demanda contra la empresa contratista, que en este caso había iniciado la construcción del hospital en Ciudad Madero, cuando en todo caso debió haberse terminado en ese año.
“Tras rescindir el contrato y proceder al reclamo de las fianzas y licitado el resto del recurso pendiente a otra empresa constructora que limitaron impidiendo darle el anticipo, se hizo otro contrato para poner en marcha la otra etapa”, explicó.
Desafortunadamente, lo que imperó en los últimos años fue el retraso de hasta seis meses por parte del Instituto de Salud y Bienestar (Insabi) para pagar a la contratista por los trabajos.
En el caso de Matamoros, comentó que el Hospital se puso en operatividad luego de que el Gobierno del Estado destinara alrededor de 160 millones de pesos, aunque están pendientes por ejecutarse el área administrativa, como el almacén y auditorio.
De no haberle destinado ese recurso, no se hubiera podido poner en marcha, porque cada proceso de pago a la constructora, entre que lo regresaban y regresaba, el Insabi tardaba hasta seis meses para poder pagarle.