Yadira Hernández / Sol de Tampico.-
Después de meses de espera, al fin concluye la cosecha de calabazas de Castilla, los productores agrícolas esperan en los próximos días comenzar la venta de esta fruta de temporada.
La familia de la Rosa Maldonado por más de 30 años se ha dedicado a la cosecha de este delicioso producto, agricultores se dicen optimistas que este año obtendrán una mejor cosecha, favoreciendo de gran manera la temporada de lluvias.
Don Rufino dijo: me siento satisfecho por el gran producto que tendrán este mes; refiere que el proceso es difícil se necesita mucho cuidado y paciencia para poder tener como resultado unas calabazas maduras, en esta temporada han llegado a pesar alrededor de diez kilos.
Mencionó que también de manera sorpresiva han cortado calabazas que llegan a pesar entre los 25 a los 30 kilos, las personas de la región las que puedan disfrutar en esta temporada de este delicioso manjar previamente elaborado con piloncillo o azúcar.
El sembradío se ubica en la ampliación San Antonio, comunidad que también es conocida como El Plátano, en Altamira y desde hace 30 años en ese lugar se siembran calabazas que en estas fechas son muy demandadas por la temporada de Halloween para decorar las casas, o hacer adornos florales y para los días de fieles difuntos para ofrendar a los visitantes, según las creencias de las familias mexicanas.
En la huerta de don Delfino hay variedad de cultivos, pero es el gran tamaño de la calabaza lo que más se hace notar, con la extensión de cultivo que se tiene, esperan este año obtener ganancias favorables, ya que mencionó que es difícil poder trasladar las enormes calabazas a otros puntos de ventas, por tal motivo la familia de la Rosa Maldonado coloca un letrero para que las personas que transitan por la carretera puedan pasar adquirir las calabazas, cuyo costo depende del peso.
El color naranja claro de las calabazas se pierde entre las hojas verdes y café, de esta manera se puede observar que ya se cumplió su ciclo y están listas para la venta.
“Está tradición la tenemos desde hace 30 años, es un gran orgullo y satisfacción cuando se cumple el ciclo y podemos ver los enormes tamaños de las calabazas quedamos sorprendidos, nosotros nos dedicamos a la venta es una manera de ganarnos algo para poder subsistir”, dijo.
Para quienes necesiten comprar calabazas y no quieran trasladarse hasta el ejido El Plátano por la distancia, pueden buscar a esta familia en Villa Cuauhtémoc, o bien pueden hacerlo con la comisariada ejidal Martha Maldonado, llamando al teléfono celular 833 293-75-94.
Los productos agrícolas están listos para comenzar con la venta de las calabazas de Castilla, que en esta temporada son muy adquiridas por la población para comenzar con su consumo de este manjar previamente elaborado con piloncillo o azúcar, pero también para la decoración de los hogares con la festividad de Halloween.
