Antonio Campos / El Sol de Tampico
El uso excesivo de dispositivos y la falta de interacción entre niños con sus padres o tutores están causando diversos comportamientos negativos, como tendencias suicidas en pequeñines de hasta cuatro años, por lo que especialistas piden reducir de forma inmediata el uso de estas nuevas tecnologías para interactuar más en familia.
El presidente de la red de la mundial de suicidiólogos, Alejandro Aguilar Tejeda, menciona que actualmente los infantes están más cerca a la muerte a causa de la interacción con las redes sociales adicional a los videojuegos, las caricaturas y muchas otras actividades que los introduce al tema del suicidio.
Agregó que cada vez los especialistas han detectado en las sesiones que los niños cada vez están más solos, en donde se ha convertido el internet, la tablet y la computadora en la nana, mientras que los adultos, quienes deberían de tener una interacción humana, tienden a trabajar o también encontraste inmersos en las redes sociales.
“El niño aprendió a suplir afectos y esto los hace sentir muy solos y como lo comentaba en la conferencia, deciden por estado de desesperación, soledad vacío, que sientan ganas de morir al pensar que en el cielo estaría bien con Dios, mientras que en la vida real se encuentra demasiado solo”.
Destacó el fundador del Instituto Panamericano de Suicidología que en cuestión del porcentaje desgraciadamente no se cuenta con muchos estadísticas exactas, porque el Inegi no los reporta, ya que en su informe solo manejan a partir de los diezs, dejando aquellos por debajo de ese rango de edad sin ser contabilizados, como es el caso de aquellos pequeñines de escasos cuatro años que se quitan la vida.
“Las estadísticas nos hablan que a nivel mundial tenemos registrados a niños de hasta cuatro años que cometieron suicidio. En lo particular yo he recibido en mi consultorio a pequeñines de ocho años, pero sabemos que cada vez más la población nueva que le llamamos la generación Alfa, las que más están en riesgo de cometer un suicidio”.
Puntualizó que los dispositivos móviles ocasionan que el niño esté acostumbrado a una satisfacción inmediata a una evasión de emociones, a ser más espectador que actor, por lo que es urgente que los padres o tutores les limiten estas tecnologías, además de involucrarse en su desarrollo para evitar que lleguen a ser los pequeñines en parte de las estadísticas mortales
“Es necesario que los padres o tutores tengan un registro o control de cuántas horas pasa el niño frente a los dispositivos y que los lleven a una interacción como ocurría en otras décadas, en donde se divertían en familia con los juegos de mesa, deportes y sin tanto entorno virtual.”
