Max Verstappen, el bicampeón mundial de Fórmula Uno, acusó que él y su familia han sufrido amenazas y abusos a través internet después de que ignoró las órdenes de su equipo Red Bull durante la carrera del Gran Premio de Sao Paulo, Brasil, el pasado fin de semana, lo que originó un conflicto con su compañero de equipo, Sergio «Checo” Pérez.
Verstappen afirmó que le gusta colaborar en equipo y que tiene una gran relación con su compañero mexicano. Dijo que sus críticos no conocen la historia completa y culpó a los medios de comunicación por hacerle quedar mal.
Aunque indicó que espera que algún día se conozcan los detalles, se negó a proporcionarlos antes de la carrera final de temporada en Abu Dabi, en los Emiratos Árabes Unidos.
El piloto neerlandés se negó a ayudar a “Checo” en el circuito de Interlagos, en Sao Paolo, Brasil, cuando marchaban sexto y séptimo, respectivamente. De haberlo dejado rebasar, “Checo” habría sumado puntos suficientes para desempatar la segunda posición de la tabla general, puesto que actualmente comparte con Charle Leclerc, de Ferrari.
Por su parte, Verstappen no tenía nada que ganar o perder, ya que su primer lugar en esta temporada supera por 200 puntos los registros de Pérez y Leclerc.
Red Bull nunca ha terminado una temporada con sus pilotos primero y segundo, por lo que pidió a Verstappen que dejara pasar a Pérez.
Esto habría sido una retribución directa luego de que el mexicano lo dejó pasar antes, en una fallida persecución por el quinto puesto.
“No fue por la posición […] fue por algo que sucedió antes en la temporada”, dijo Verstappen en conferencia. En medio de especulaciones de que se refería al Gran Premio de Mónaco que ganó Pérez, decidió no confirmar.
“Ya lo expliqué en México y el equipo lo entendió y estuvo de acuerdo”, señaló. “Fuimos a Brasil y sólo pensé en que íbamos a correr y a intentar conseguir el mejor resultado posible. Tuvimos un poco de falta de comunicación el sábado y el domingo: no se me había dicho nada sobre un posible intercambio”.
El piloto comentó que el equipo debió haber sabido cuál sería su respuesta cuando se planteó el asunto en la última vuelta, pero que ahora ya todo se platicó y resolvió.
“Después de esa carrera, por supuesto, quedé muy mal en los medios de comunicación”, acusó. “Pero tampoco tenían la imagen clara. Ponerme así de inmediato es bastante ridículo. No saben cómo trabajo en el equipo y lo que el equipo aprecia de mí. Todas las cosas que he leído son bastante desagradables”.
“Incluso más que eso, [las redes sociales] empezaron a atacar a mi familia”, afirmó. “Amenazaron a mi hermana, a mi madre, a mi novia, a mi padre. Y para mí eso va demasiado lejos. Si tienen un problema conmigo, está bien. Pero no vayas contra mi familia porque eso es simplemente inaceptable”.
“Cuando tu propia hermana te escribe que se está volviendo demasiado y que tienes que hacer algo al respecto, creo que eso dice lo suficiente”, añadió. “Y entonces sí que me afecta porque no se puede atacar a mi familia”.
Con información de: nmas.com