José del Carmen Perales Rodríguez.-
Cd. Victoria, Tam.-
Derivado de que a nivel nacional existe una alerta sanitaria máxima por los riesgos a la salud que representan los productos comúnmente denominados vapeadores, en la entidad la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Coepris) reforzó las acciones para prevenir su uso.
A través de mensajes publicados en sus cuentas de redes sociales, la dependencia hace la advertencia a la población en general sobre las graves consecuencias que puede generar el inhalar las sustancias que utilizan estos dispositivos.
“Si vapeas te dañas y el daño puede ser irreversible. Que no te confundan, la ciencia y @COFEPRIS han hablado. Vapear no es menos dañino que fumar, al utilizar un vapeador inhalas sustancias tóxicas que pueden provocar enfermedad pulmonar, diarrea, falta de aliento, entre otras”, advierte.
Por otra parte, en su alerta sanitaria máxima emitida en mayo la Cofepris se refiere a “los posibles graves daños a la salud ocasionados por las sustancias que usan estos productos, en los cuales se ha detectado frecuentemente acetato de vitamina E constituye un riesgo alto para la salud”.
La alerta precisa que se trata de una sustancia tóxica que puede ocasionar enfermedades respiratorias agudas e incluso la muerte, por lo que se advierte sobre su uso frecuente, sin atender a las recomendaciones de expertos no solo nacionales sino también internacionales.
Agrega que tanto los cigarros electrónicos (E-cig o vaporizadores) y los productos de tabaco calentado son promovidos como una alternativa para dejar de fumar, pero su eficacia no ha sido comprobada.
Sin embargo, subraya su advertencia sobre las sustancias utilizadas por estos dispositivos, que son derivados de compuestos carcinógenos, sustancias tóxicas y emisiones en forma de aerosol, representan un grave riesgo para quienes los consumen.
Finalmente se dio a conocer que se inició el decomiso de vapeadores, la vigilancia a través de visitas de verificación y se pidió realizar las denuncias sobre máquinas expendedoras y puntos de venta que comercialicen estos productos, sobre todo aquellos que representan mayor riesgo de ser consumidos por menores de edad.