José del Carmen Perales Rodríguez.-
Cd. Victoria, Tam.-
La propuesta de incremento del 20 por ciento al salario mínimo tendría que ir acompañada de un efectivo control de la inflación, crecimiento y mayor empleo para evitar que se volatilice, como sucedió a lo largo del 2022 con el aumento autorizado a principios de año.
Así lo advirtió Pablo Reyna Quiroga, vicepresidente de afiliaciones de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac), quien adelantó que inevitablemente cualquier alza al salario irá gradualmente a recalar en el consumidor final.
“Que se mantenga el salario real depende del control inflacionario, que junto con al crecimiento económico y la oferta y demanda laboral van a marcar la pauta para el éxito del posible incremento salarial del 20 por ciento”, expuso.
Explicó que es necesario buscar un punto de equilibrio en donde el salario realmente vale lo que debe ser acorde a la demanda del mercado, mencionando que si bien hay muy buenas intenciones al subir el 20 por ciento el salario, hay que analizar otros factores.
“Al subir ese porcentaje lo que va a pasar es que si por algún motivo no se tiene un equilibrio entre la oferta y la demanda laboral, es que habrá una descompensación en donde el incremento es superado por los precios de los bienes y servicios”, advirtió.
Reyna Quiroga mencionó que esto ocurrirá porque el mercado va a detectar que la población trae dinero y está dispuesta a pagar, lo cual irremediablemente propiciará a su vez un incremento similar en la inflación.
“La realidad de las cosas es que la inflación ahorita está proyectada en 8.5 por ciento y traemos un crecimiento de 3.5 por ciento de acuerdo con información de Gobierno, pero la percepción de la inflación ha sido mucho más alta, sobre todo en productos básicos como son los alimentos”, apuntó.
El empresario precisó que el hecho de aumentar el salario por encima de la inflación no significa que los precios y condiciones se vayan a mantener, porque en todos los sectores se comienzan a dar aumentos en forma escalonada en productos y servicios.
“La propuesta del 20 por ciento de aumento salarial puede ser bien vista por muchas personas, pero si somos realistas no se está ganando nada, porque el ingreso real se desmerece por esa alza en la inflación, es decir, que los precios se comen ese aumento”, finalizó.