El jefe del Ejecutivo federal, Andrés Manuel López Obrador, deseó una feliz Navidad a todos los mexicanos, y dejó en claro que él no odia a ninguna persona pese a los cuestionamientos que hace a diario.
Desde Villahermosa, en el estado de Tabasco, López Obrador aseguró que práctica la doctrina del amor al prójimo, y que habla fuerte sobre lo que ocurre en el país, pero que no tiene “malas entrañas”.
“Yo deseo pues una feliz Navidad a todos los mexicanos, los abrazo a todos, a todos, a todos, yo no odio, yo practico la doctrina del amor al prójimo, sinceramente no le deseo mal a nadie”, dijo.
“Soy duro en mis cuestionamientos porque es mi misión, mi tarea, el que se avance en la revolución de la consciencias para que nunca más se repitan las arbitrariedades, que nunca mas regrese un régimen corrupto de injusticia de privilegios, y si no hablamos claro van a volver a manipular y a envolver a la gente, ya a va ser difícil, pero no porque hablo yo fuerte significa que tengo malas entrañas”, apuntó.
Advirtió que hay personas que desean que le vaya mal al país, para que se vea afectado el Gobierno de la Cuarta Transformación, aunque recalcó que es el propio pueblo quien los pone en su lugar.
“Hay mucha gente que le apuesta eso, bueno no tantos, pero sí hay quienes quisiera que le fuera más mal al país para que nos fuera mal a nosotros, pero saben que se están autolimitando, el mismo pueblo se encarga de ponerlos en su sitio. Es que el que se pasa de inmediato tiene que rectificar, yo lo veo en las redes sociales”, indicó.
“Puede ser que ellos en sus arranques de prepotencia, de mala fe, actúen así pero yo avergüenza, antes no, es lo mismo del clasismo, de que antes podían discriminar y ahora no, ahora alguien discrimina o se manifiesta de manera racista o clasista inmediatamente después la gente responde”, subrayó.
Con información de: lopezdoriga.com