Alfredo Guevara / El Diario Mx
Cd. Victoria, Tam.- El flujo de personas originarias de Haití, Perú, Venezuela y centroamericanos a Reynosa y Matamoros con intenciones de ingresar a Estados Unidos se sigue registrando en municipios como Reynosa, Matamoros y Nuevo Laredo.
Sin embargo, el desenlace de todo este flujo migratorio podría tener un fin si se anula el título 42 por un juez del vecino país del norte, porque en lugar de estar varados los migrantes en municipios de la frontera de Tamaulipas, pasarían y esperarían el asilo político, pero en Estados Unidos, expuso Juan José Rodríguez Alvarado.
El director del Instituto Tamaulipeco del Migrante (ITM), reveló que a la fecha son más de ocho mil migrantes que se encuentran residiendo en poco más de 12 albergues o casas del migrante en municipios como Nuevo Laredo, Reynosa y Matamoros.
“En Reynosa tenemos cuatro mil 557 extranjeros, en su mayoría de Haití, aunque también de otras nacionalidades como de Venezuela, en tanto que Matamoros están tres mil 272 personas varadas hasta en tanto no se determine su situación respecto a la aplicación del título 42, es decir, que les determinen si pasan o no a los Estados Unidos”, explicó.
Rodríguez Alvarado recordó que desde el pasado 13 de octubre en que entró en vigor el acuerdo de devolución de venezolanos por territorio mexicano, han llegado alrededor de cuatro mil migrantes que han sido recibidos en el puente internacional de Matamoros.
“Y aunque son trasladados a la Ciudad de México a tramitar su visa humanitaria, la mayoría de ellos su intención es ingresar a los Estados Unidos y por lo tanto se regresan y se vuelven a quedar en Matamoros”, abundó.
Hay originarios de Perú, Rusia, centroamericanos, de Venezuela, Haití y otras nacionalidades, cuya característica es recibir el asilo político e ingresar al vecino país del norte.
Sin embargo, antes de cruzar la línea divisoria, tienen que aplicar entre otras cosas el título 42 que no es otra cosa que una norma sanitaria de los Estados Unidos, para que las personas migrantes puedan ingresar a territorio estadounidense.