El papa emérito Benedicto XVI, cuyo estado de salud sigue “estable” dentro de la gravedad, ha podido asistir a una misa celebrada en su habitación, informó el director de la oficina de prensa del Vaticano, Matteo Bruni.
“Anoche el papa emérito pudo descansar bien. También participó en la celebración de la Santa Misa en su habitación ayer por la tarde. Actualmente su estado es estable”, indicó Bruni en un comunicado.
El portavoz vaticano había explicado ayer que el papa emérito, permanecía “absolutamente lúcido y vigilante” tras confirmar la víspera un “agravamiento” de su salud “por el avance de la edad”.
A pesar de su delicado estado, Benedicto XVI se encuentra “muy sereno” y pudo concelebrar la misa con monseñor Georg Gänswein, su secretario personal, ataviado con una ligera estola sobre su bata, según detallaron algunos medios, citando fuentes cercanas al papa alemán.
El pontífice, que está “respondiendo positivamente al tratamiento”, según las mismas fuentes, rechazó ser trasladado a un hospital desde la residencia Mater Ecclesiae, en los jardines vaticanos, vive apartado desde 2013, tras su renuncia, y donde continúa en constante vigilancia por los equipos médicos y acompañado por Gänswein.
Con información de: lopezdoriga.com