
Mauricio Zapata
Muchos servidores públicos de todos los niveles de gobierno están bien aplicados en la famosa “veda electoral”; tan aplicados están que algunos no quieren ni salir a la calle.
Muchos son de doble moral, porque si va alguien a pedirles alguna declaración sobre algún tema, batean al reportero y ponen como pretexto el no querer violar la Ley Electoral.
Pero por otro lado, y por debajo de la mesa, hacen cosas que parece que no les importan las normativas que las autoridades electorales y la Constitución imponen.
Ah, pero eso sí, que no lo haga el adversario político porque entonces lo gritan a los cuatro vientos.
Y a todo esto sólo nos queda señalar una de dos: o no han leído bien la Ley o de plano no le entienden.
Y es que la “veda electoral” no les prohíbe trabajar. Tampoco seguir con sus actividades cotidianas. Tampoco prohíbe hacer declaraciones a un medio de comunicación, siempre y cuando éste vaya a pedir información.
Lo que la Ley dice claramente (para los que no entiendan) el siguiente punto que a continuación transcribo:
“(Se prohíbe) ordenar, autorizar, permitir o tolerar la entrega, otorgamiento, administración o provisión de recursos, bienes o servicios que contengan elementos visuales o auditivos, imágenes, nombres, lemas, frases, expresiones, mensajes o símbolos que conlleven, velada, implícita o explícitamente: a) La promoción personalizada de funcionarios públicos; b) La promoción del voto a favor o en contra de determinado partido político, coalición, precandidato o candidato; o, c) La promoción de la abstención”.
En pocas palabras lo que no se permite es difundir su trabajo; condicionar la entrega de apoyos; decir que gracias a su partido se da tal o cual cosa.
Es claro el artículo 41 Apartado C de la Constitución Política del país:
“Durante el tiempo que comprendan las campañas electorales federales y locales y hasta la conclusión de la respectiva jornada comicial, deberá suspenderse la difusión en los medios de comunicación social de toda propaganda gubernamental, tanto de los poderes federales y estatales, como de los municipios, órganos de gobierno del distrito federal, sus delegaciones y cualquier otro ente público. Las únicas excepciones a lo anterior serán las campañas de información de las autoridades electorales, las relativas a servicios educativos y de salud, o las necesarias para la protección civil en casos de emergencia”.
A ver si así les queda más claro y se dejan de tonterías.
EN CINCO PALABRAS.- Hasta parece que se hacen.
PUNTO FINAL.- “Nunca se dan tiempo, por eso nunca tienen tiempo”: Cirilo Stofenmacher.
Twitter: @Mauri_Zapata