Claudia Velázquez / Contacto
Una inflación más fuerte de lo que se esperaba, incluso llegando a ser “agresiva”, fue la que se presentó al cierre del mes de enero, impactando a la canasta básica, pues si bien se compra con la misma cantidad de dinero, la realidad es que se compran menos productos, dijo Oscar Martínez Torres.
El presidente de la Unión de Comerciantes y Empresarios del Noreste (UCEN) expresó que estiman que el costo promedio de la canasta básica anda arriba en un 20 o 30 por ciento más de lo que gastaba hace un mes.
“Hay quienes dicen que es un diez por ciento más, el gobierno dice que es menos, sin embargo, las familias que acuden a hacer sus compras de despensa y víveres necesarios para el hogar se dan cuenta que es más”, añadió.
“La verdad nos damos cuenta de que cuando vamos a pagar es mucho más de lo que estábamos pagando, la gente tiene que implementar su estrategia de compra, llevar menos cantidad de productos para gastar lo mismo”, agregó.
Martínez Torres indicó que quizás en los salarios al final del día o en el ingreso del empleado no es un impacto tan alto o los trabajadores ya ni lo sienten porque todo sube precio y lo que obtuvieron de aumento al salario se lo gastan en los productos que también suben de costo.
Concluyó que el mes de enero estuvo tranquilo en cuanto a las ventas se refiere, pero también se dieron cuenta de que las actividades, tanto laborales como escolares, retornaron a la normalidad.