Por Francisco Medina Guerrero.-
CIUDAD VICTORIA.- Rodeada de cuatro de sus seis hijos, 22 nietos y cuando menos 36 bisnietos, “al último corte” llevado por la propia familia, Candelaria Hernández de Almaguer festejó este sábado 103 años de edad, lo que la convierte en la mujer más longeva de esta Ciudad Capital.
“El día jueves cumplió 103 años, fue el día dos de febrero, Día de la Candelaria, le estamos haciendo este festejo, tratamos de reunirnos los más que pudimos de su familia para honrar a mi abuelita”, refirió su nieta Cristina Hernández Guzmán.
“Sería difícil ahorita sacarle la cuenta, no hemos actualizado, ya aumentó, hace unos meses nació el hijo de una bisnieta, va creciendo la familia”, señaló.
Caminando por su propio pie, la cumpleañera Candelaria Hernández de Almaguer se reunió con sus hijos, nietos y bisnietos en la mesa de honor para aplaudir y escuchar las tradicionales “Mañanitas”, entonadas por un grupo musical que amenizó el festejo.
Una de sus nueras, Catalina Reyes Martínez, se dijo orgullosa de pertenecer a esta gran familia; “es una excelente persona, siempre se ha portado muy bien con nosotros y no tengo nada de quejas, nada, un orgullo tenerla tenerla como suegra y que nos ha durado tantos años”.
“Que nos portemos bien y que hagamos caso, es lo que nos dice ella”.
De acuerdo con sus familiares, la cumpleañera Candelaria Hernández de Almaguer con sus 103 años no es diabética ni hipertensa y le gusta comer de todo.
Entrevistada en medio de su festejo, Candelaria Hernández de Almaguer dijo; “yo como de todo, carne de puerco, asado, no me hace daño nada, yo desayuno, almuerzo como y meriendo, hasta eso”.
Sus familiares refieren que le gustan los nopales, los quelites, las chochas, frijoles, tortilla con chile, acelgas, y tortillas hechas a mano.
En cuestiones de cocina y la elaboración de los guisos de su preferencia, dijeron sus nueras y nietas; “ya no la dejamos, pero si por ella fuera sí cocinara, pero nos da las recetas, cómo quiere que se le haga, muy consciente, muy lúcida siempre da las instrucciones”.
Originaria de Tampico, a sus 16 años doña Candelaria vino a radicar al ejido Benito Juárez, conociendo a quien fue su esposo en Charcos de Abajo, quien falleció a la edad de 85 años.
“Lo conocí con un tío, el trabajaba en una labor, gracias a Dios tengo mis hijos, nietos, bisnietos, tataranietos”, reveló doña Candelaria.
Al referir su gusto por la música y el baile, Candelaria Hernández de Almaguer dijo; “ahora las nietas son iguales, bailadoras como la abuela”.
“Dios me ha dado mucha vida para pasarla, estoy rica en nietos, bisnietos, tataranietos”, recalcó al ser entrevistada para continuar con su festejo que se realizó en un salón de eventos de esta Capital.