Por Rogelio Rodríguez Mendoza.-
Después del secuestro de cuatro ciudadanos estadounidenses —dos de ellos asesinados—, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), envió a Matamoros 200 militares y 100 elementos de la Guardia Nacional.
El arribo de los elementos castrenses ocurre apenas 24 horas después de que los norteamericanos fueron rescatados en una casa de seguridad del crimen organizado.
Los 300 oficiales se suman a los que ya habían arribado desde el pasado fin de semana, luego de que el FBI reportó el plagio de los cuatro ciudadanos estadounidenses y ofreció una recompensa de 50 mil dólares a quien diera información que permitiera su localización y la captura de los responsables.
Las fuerzas federales patrullan toda la ciudad presuntamente como parte de un operativo para detener a todos los implicados en el secuestro ocurrido, a plena luz del día, el pasado viernes tres de marzo, sobre las calles Primera y Lauro Villar.
La versión oficial indica que los norteamericanos fueron confundidos con miembros de un cártel rival, que los atacó a balazos cuando circulaban en una camioneta con placas de Carolina del Sur.
En un video que se ha reproducido millones de veces en redes sociales, se aprecia cuando hombres armados suben a la caja de una camioneta Pick-Up, a las cuatro víctimas. Dos de ellas iban inconscientes y se presume que ya estaban sin vida.
Este martes, los plagiados fueron localizados en un predio del ejido El Tecolote. Dos estaban sin vida. Un hombre que los vigilaba, identificado como José Guadalupe González Macías, “El Greñas”, de 24 años de edad, y quien dijo ser lavacarros, fue detenido.
Por su parte, la Fiscalía General de Justicia del Estado informó que, hasta la mañana de este miércoles los cuerpos de los dos norteamericanos asesinados continuaban en el Servicio Médico Forense (Semefo), debido a que los trabajos forenses no habían terminado.
A la vez, aseguró que las familias de las personas que fallecieron no habían reclamado los cuerpos.
Los estadounidenses rescatados con vida fueron identificadas como, Latavia, “Tay”, Mcgee Washington y Eric James Williams, quienes fueron entregados al FBI desde el mismo martes. Junto con sus compañeros asesinados habían viajado desde Carolina del Sur, para que uno de ellos se practicara una liposucción, en Matamoros.
Durante la balacera, los delincuentes asesinaron a Areli Pablo Servando, de 32 años de edad, quien fue alcanzada por una de las balas cuando transitaba por el lugar.