Alfredo Guevara.-
Cd. Victoria, Tam.-
La violencia contra la mujer, de reflejarse solamente entre la familia o el matrimonio, se extendió hacia el noviazgo, donde las jovencitas que apenas inician una relación sentimental son víctimas de algún tipo de agresión física o psicológica.
La directora del Instituto de la Mujer en Tamaulipas, Diana Luz Gutiérrez González, admitió que la violencia contra las féminas se sigue registrando, al grado de que hasta antes del mes de marzo había hasta el mes de febrero por lo menos 600 casos, destacando lugares como la Capital del Estado.
Ante el nuevo fenómeno social que se está registrando, ahora con las agresiones contra la mujer en la etapa de noviazgo, apuntó que el Instituto y demás instituciones vinculadas con la prevención o la erradicación de este tipo de violencia empezaron a brindar capacitación a las jovencitas.
“Estamos capacitando a las jovencitas que cursan el nivel de preparatoria en aras de erradicar o prevenir la violencia en la etapa de noviazgo, donde apenas están empezando a salir con una persona y ya son víctimas de algún tipo de agresión por parte del varón”, aseveró.
Dijo estar enterada de la iniciativa de reforma a la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, con el objeto de que se sancione a los jóvenes cuando incurran en una conducta violenta contra la mujer, al estar prácticamente exentos de una sanción.
Y es que cuando se trata de un noviazgo no se considera violencia intrafamiliar, lo sería cuando es en la familia y tiene algún tipo de sanción contra quien la comete, pero en la etapa de noviazgo no, de ahí la importancia de que se establezca como delito, susceptible de una medida correctiva, tratándose de jóvenes.
Indicó que las sanciones por violencia son menores cuando no es esposo o pareja, y las penas más severas cuando es familiar, sostuvo.
Diana Luz Gutiérrez González convino en que la violencia contra la mujer, en el hogar, el matrimonio y ahora en el noviazgo, es multifactorial, es decir, que obedece a muchos factores.
Desafortunadamente, supo reconocer que lejos de disminuir, la violencia contra la mujer se ha extendido y se refleja ahora desde la etapa del noviazgo.