Redacción ED.-
Nuevo Laredo, Tam.- Además del descenso en la temperatura y tormentas eléctricas, el frente frío número 47 trajo consigo la caída de granizo para Nuevo Laredo; y aunque los cambios en las condiciones climatológicas para mediados de Semana Santa ya estaban pronosticados, no dejó de sorprender a la ciudadanía dicho fenómeno.
Fue casi a la media noche del miércoles cuando, después de las lluvias, inició esta precipitación sólida, en forma de “pelotas” de diferentes tamaños que rebotó sobre los techos de las viviendas y los capacetes de los vehículos.
Fue así que algunos patios, calles y sectores de algunas avenidas se “pintaron” de blanco, convirtiéndose en todo un espectáculo de Semana Santa.