AGENCIAS.-
Un adolescente hondureño de 17 años, que llegó a Estados Unidos sin padres o tutor, murió mientras estaba bajo custodia de las autoridades en un refugio para menores no acompañados en Florida.
El Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU. confirmó la muerte sin dar más detalles.
El ministro de Relaciones Exteriores de Honduras, Eduardo Enrique Reina, pidió una «investigación exhaustiva» sobre la muerte del menor.
La Casa Blanca también se pronunció sobre el suceso, calificándolo como «muy triste».
Esta muerte se produce después del fin de la medida Título 42 que permitía la expulsión inmediata de migrantes debido a la pandemia de COVID-19.