El mandatario mexicano Andrés Manuel López Obrador aseguró que la ocupación temporal de un tramo de la vía de Ferrosur, propiedad de Grupo México, es legal y constitucional; además, descartó que se trate de una afrenta contra Germán Larrea, dueño del conglomerado, por lo que podría alcanzarse un acuerdo.
«Porque dicen: se expropió, ¿qué se expropia? lo que es propiedad privada, es muy distinto a recuperar una concesión que es de la nación. (…) Esta concesión o este tramo de concesión tiene que restituirse, es lo único, y nosotros, buscando un acuerdo, les damos el derecho de paso. Pero la vía, que es de la nación, va a regresar al dominio de la nación por seguridad nacional y por interés público y es completamente constitucional y legal», destacó.
El Presidente aseguró que ya estaban avanzadas las negociaciones con Grupo México para que la Secretaría de Marina tomara el control de la vía y al mismo tiempo se les permitiera el uso a los trenes de Ferrosur, sin embargo, se interrumpieron las pláticas porque empezaron exigir una indemnización por 9 mil 500 millones de pesos.
Además, destacó que si la ocupación se vuelve permanente dependerá de la actitud de la empresa.
De acuerdo al Presidente, se empezó a negociar con Grupo México la recuperación del tramo Coatzacoalcos-Medias Aguas y ya se había logrado avanzar en un acuerdo, sin embargo, consideró que los abogados mal aconsejaron a Germán Larrea.
Esto provocó que se cortara la comunicación entre Grupo México y el secretario de Gobernación, a quien la empresa ya ni siquiera le tomaba la llamada y por tanto se decidió publicar el decreto.
Ante esto, el Presidente destacó que siguen pasando los trenes de Grupo México, «eso también hay que informarlo, siguen entrando, sin problema».
«No es un asunto personal, no es un pleito con Germán Larrea, ojalá y comprendan no solo los de esta empresa sino otros empresarios y quienes no están de acuerdo con nosotros, ojalá y en un momento de sensatez piensen que un gobernante tiene que representar a todos y que tiene que cuidar el interés público, es un servidor público, no es un empleado, un gerente, un gobernante representa a todos y se tiene que procurar que haya justicia y qué es la justicia, pues darle más al que tiene menos, porque no puede haber trato igual entre desiguales. Y qué se tiene que buscar, la felicidad del pueblo», agregó.
López Obrador abrió la posibilidad de pagar, si fuera el caso, una especie de indemnización a Grupo México por restituir el tramo ferroviario a la nación.
Sin embargo, dejó en claro que primer tendría que hacerse un avalúo.
“Yo no sé, bueno, los abogados, asesores, expertos, mal aconsejan y vienen con una propuesta de que querían que les pagáramos 9 mil 500 millones de pesos, pues así ya no se puede. Sí , pero ni siquiera a un precio justo, un abuso”.
“Que se haga después del procedimiento que la autoridad haga un avalúo y se haga una indemnización, es que les corresponde, pero imagínense pagar 9 mil 500 millones, eso es todo”, agregó.
En tanto, dijo que no tiene en puerta una próxima reunión con Larrea porque se va a esperar a que se llegue a un acuerdo en buenos términos. Y aclaró que si la Secretaría de Marina ingresó a la zona es para que no haya un sabotaje y luego culpen al gobierno.
“Es para cuidar que no haya un sabotaje y que nos culpen, pero no es para que se detengan las operaciones, están operando, eso también informarlo. También aclarar todo, esto no tiene que ver con la operación que están haciendo para comprar Banamex”, puntualizó.
El viernes pasado, la Secretaría de Marina (Semar) emitió un decreto para la ocupación temporal de diversos tramos del ferrocarril en el Istmo de Tehuantepec, en Veracruz, los cuales eran posesión de Ferrosur, propiedad de Grupo México.
La Semar explicó que una de las razones para realizar esta ocupación se debe a que es imperativo tener el control y administración de todas las líneas ferroviarias que comprenden el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, para el funcionamiento eficaz de la plataforma logística.
Con información de: milenio.com
