Agencias.-
En Cuernavaca, un repartidor de Rappi regresó a un domicilio para vengarse de un usuario debido a una mala calificación.
El repartidor arrojó el paquete de comida y luego regresó lanzando piedras, dañando un auto estacionado.
El usuario compartió la experiencia en redes sociales, adjuntando los datos del repartidor y fotos del auto dañado.
El repartidor, llamado Cristian Andrés Benitez Culin, actuó de manera irresponsable y no verificó la propiedad del vehículo.
El usuario espera que el repartidor se haga responsable de los daños ocasionados al automóvil.