Patricia Azuara.-
Fue un proyecto que nació en una mesa de café.
La Gerencia General de la Organización Radiofónica Tamaulipeca (ORT) tenía en mente crear un espacio de contacto con la sociedad para lograr un vínculo real entre la población y el gobierno.
Jesús Rodríguez y Santiago Martínez eran los conductores ideales, pero ¿aceptarían?
Eran alrededor de la 10:00 de la mañana cuando Claudia Vázquez, Gerente General de ORT y compañera del par, desayunaba con los reporteros.
Sin pensarlo lanzó la propuesta.
“Chicos hagamos un programa de demandas, reportes y quejas ciudadanas, ¿se avientan?”, platicó Vázquez para El Diario de Ciudad Victoria.
Un proyecto inesperado que podría o no funcionar como cualquier programa. ¿Por qué no intentarlo?, se dijeron.
Sin estar totalmente convencidos, Jesús y Santiago aceptaron el reto, no había nada que perder, pero sí mucho que ganar en favor de los victorenses.
Mientras, continuaron degustando aquellas gorditas de chicharrón crujiente que tanto les gustan.
EL ARRANQUE
El día del arranque, Claudia preparó un guión para darle forma al programa.
“Las Mañanitas” fue el nombre que eligieron.
A los pocos minutos de que inició el proyecto, aquel boceto quedó de lado, y Chuy y Chago simplemente fueron ellos.
Relajados, sin reglas, sin metodología, pero con la firme convicción de servir a la población y lograr el objetivo del espacio.
Las hojas de los puntos a seguir, irónicamente, no se siguieron.
Sin imaginar que eso fue lo que meses más tarde los colocaría en el gusto de grandes y también chicos.
“Un día estábamos desayunando, y llega Claudia Vázquez y me la tira sin agua va, estaba a mi lado Chuy, y dije, apenas con él, sí voy, pero ven conmigo, porque no sé que nos depara, Chuy quedó sorprendido porque tampoco sabía, pero también jaló”, recordó Chago.
“La idea era tener un guión, había una idea, pero decidimos nosotros en el transcurso de los días ser nosotros, la confianza que nos brindó, tanto el ingeniero Enrique Cárdenas, como Claudia Vázquez. Tratamos de dominar todos los temas, porque estamos en la calle, y creemos que traemos el termómetro de las quejas, que es la esencia del programa”, insistió Chago.
“Hay programas de noticias, sin embargo, las quejas son comunes, están en todos lados, y se tienen que ver desde otro ángulo, y qué mejor manera de llegar a la gente, al natural como es uno, algo diferente, desde que nos anuncian, no somos Santiago y Jesús, somos Chago y Chuy, qué mejor que sentirnos a gusto desde que inicia el programa”, sostuvo Chuy.
“Qué mejor manera de conectar con la gente y sensibilizarnos y entender que es complicado porque es un programa de quejas, y no es solo leer las quejas, pero atenderlas y buscar solución, gestionar”, remarcó Chuy.
LOS AMIGOS
Amigos desde hace más de dos décadas, “Las Mañanitas” vino a refrendar el compromiso que tienen con el periodismo y la sociedad. Y pese a las mentadas de madre, que de repente los alcanza, decir sí, aquel día, fue la mejor decisión que pudieron tomar, coincidieron.
El compaginarse de la manera que lo hacen, el usar lenguaje coloquial sin caer en las faltas de respeto, los “chascarrillos”, e incluso la manera burlesca de referirse a las autoridades, fue el engranaje perfecto para colocarse rápidamente en el gusto de la población.
LAS MAÑANITAS
Hoy “Las Mañanitas” es uno de los programas más escuchados de la barra de la ORT.
Y Chuy y Chago se crecen como la espuma y hoy, la población, los hace parte de su cotidianidad y su intimidad.
“Por un foco que cambies, le cambias la vida al entorno, iluminar su barrio, su entorno, eso de llegar a través de que nos escuchan. Se siente padre que te reconozcan por tu voz, y no solo quejas, sino también apoyos ciudadanos y el lograr esa sensibilidad hacia los problemas de la gente, es lo principal”, concluyó Chago.
“No es descubrir el hilo negro, es escuchar a la gente, y siempre remarcamos eso, yo no te lo voy a resolver, pero vamos a estar como cuchillito de palo para que lo resuelvan”, concluyó Chuy.