Feliciano Diéguez / Líder Web – AMT
Cientos de venezolanos que buscan asilo por parte de Estados Unidos cumplieron una semana de haber llegado a Nuevo Laredo.
Han sido días muy difíciles para estas personas, después de un viaje de aproximadamente tres meses, desde su país a esta frontera. Llegan cuando casi acababa de terminar la ola de calor que trajo temperaturas de hasta 47 grados centígrados.
Afortunadamente para ellos, como sucede siempre, la sociedad civil entró en acción. Iglesias cristianas, Casa del Migrante Nazareth, Médicos sin Fronteras y autoridades apoyaron a estas personas, ubicándolas en el Parque Morelos, llevándoles alimentos y servicios médicos indispensables.
El movimiento en este campamento de migrantes se veía más relajado. Incluso, el número de venezolanos parecía haber descendido, encontrando comentarios que diariamente cruzan, cuando menos, 50 personas a Estados Unidos.
La esperanza de una vida mejor para ellos no la abandonan. Comentan que en su patria las condiciones políticas y económicas son muy difíciles, por ello buscan asilo en el vecino país para salir adelante.
Es notorio el cuidado que tienen estas personas con los aproximadamente 400 niños que viajan con ellos, procurando evitar la exposición al sol y brindarles líquidos y alimentos suficientes.