Diego López Bernal.-
Cd. Victoria, Tam.-
Los tamaulipecos usuarios de Internet que fueron víctimas de ciberacoso aumentaron de 21.0 a 21.5 por ciento del 2021 al 2022 y la principal forma de intimidación fue el contacto mediante identidades falsas, con el 31.6 por ciento de los casos.
El Módulo sobre Ciberacoso (Mociba) da a conocer que Tamaulipas está entre las entidades que menos afectación tuvieron hasta el año pasado, compartiendo la posición número 18 con Zacatecas; la Ciudad de México y Jalisco, con 16.9 por ciento, tienen los porcentajes más bajos, seguido de Morelos, con 17.2.
En el extremo opuesto, con más internautas que aseguraron haber sido acosados, se encuentran Tlaxcala, con el 30.4 por ciento; Durango, Tabasco y Yucatán, con 27.9, y Oaxaca, con el 27.0 por ciento, abunda el informe del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) de este jueves 13 de julio.
Con un promedio nacional de 20.8 de ciberacoso, el desglose de los resultados del Mociba del 2022 revela que en nuestro estado las mujeres enfrentan más de estas situaciones que los hombres; mientras entre ellas alcanza un 23.9 por ciento en ellos es de apenas 18.9.
También se da a conocer que los tamaulipecos en general que fueron víctimas de ciberacoso el año pasado pasaron en promedio 5.9 horas conectados, mientras que en Sonora registra el mayor tiempo, con 7.1 horas, seguido de Sinaloa y Baja California Sur, con 6.8 y 6.7, respectivamente.
El módulo del Inegi también da a conocer las principales formas de acoso en México, las cuales varían según el género; en los hombres fueron el contacto mediante identidades falsas, con 39.0 por ciento; en segundo lugar, mensajes ofensivos, con 35.3, y en tercer lugar llamadas ofensivas, con 25.0 puntos porcentuales.
En el caso de las mujeres también el contacto mediante identidades falsas fue la principal forma de ciberacoso, con 36.0, y los mensajes ofensivos también coinciden en la segunda posición, con 35.5 por ciento, se detalla en el informe.
Sin embargo, el acoso sexual hace su aparición como tercera y cuarta mayor forma de intimidación a las mujeres, con porcentajes de 34.8 las insinuaciones o propuestas sexuales y de 33.6 la recepción de contenido sexual, situaciones que en los hombres se presentan poco, con 15.1 y 18.5 por ciento, respectivamente.