Agencias.-
Ashley Summers, una mujer de Indiana, murió por beber demasiada agua en poco tiempo.
Mientras estaba de viaje con su familia, se deshidrató y bebió cuatro botellas de agua en 20 minutos para calmar la sed.
Luego sufrió una inflamación cerebral y falleció en el hospital debido a la toxicidad del agua.
Los médicos informaron que este tipo de muerte ocurre en personas que beben grandes cantidades de agua sin suficiente sodio en el cuerpo, especialmente en verano.
Ashley era donante de órganos y, tras su muerte, se salvaron cinco vidas con sus donaciones.
The family of 35-year-old Ashley Summers is speaking out to warn others after the wife and mother of two passed away over the 4th of July weekend from what doctors told them was “water intoxication.” @eriellereshef reports. pic.twitter.com/mu1OmamQNP
— Good Morning America (@GMA) August 4, 2023