Rogelio Rodríguez Mendoza
Los últimos cinco años del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, han sido los peores para la agricultura de Tamaulipas, aseguró Raúl García Vallejo.
El dirigente de la Liga de Comunidades Agrarias y Sindicatos Campesinos, de la Confederación Nacional Campesina (CNC), calificó al gobierno de la llamada “cuarta transformación”, como el principal enemigo del campo.
Recordó que, desde el inicio de la actual administración, el gobierno federal eliminó todos los programas de subsidio para los agricultores, y a partir de ahí comenzó la caída del sector.
A la ausencia de subsidios gubernamentales se sumó la adversidad climática porque inició una terrible sequía que ha venido golpeando severamente al campo.
“Nosotros hemos visto que el peor enemigo de los productores es el gobierno federal. Eso es muy preocupante para nosotros porque no tenemos ningún incentivo” mencionó.
Advirtió que el problema irá agravándose hasta en tanto el gobierno no cambie su política agropecuaria y reactive los programas de apoyo al sector.
La consecuencia del abandono que enfrenta el campo por parte de los gobiernos es que cientos de productores han tenido que dejar de sembrar porque carecen de los medios económicos para hacerlo.
Se estima que, tan solo durante los tres últimos años cerca de 70 mil hectáreas han dejado de sembrarse y permanecen en el abandono total.
García Vallejo dijo que también hay desánimo porque no existe un precio de garantía para el principal cultivo en Tamaulipas, que es el sorgo, lo cual genera el riesgo de que al levantar la cosecha el valor del grano no permita ni siquiera recuperar los costos de inversión.
Una situación de esa naturaleza ocurrió con la reciente cosecha del grano rojo.