Patricia Azuara.-
Cd. Victoria, Tam.-
Victoria Alejandra Alemán Puga apenas cumplió once años y ya tiene muy claras sus metas. A su corta edad es una emprendedora con planes a futuro que no piensa claudicar.
Todo comenzó cuando salió de vacaciones de verano. Su papá, para mantener entretenidos a ella y sus hermanos, decidió comprarles unos paquetes de piedras, cuerdas, ligas, entre otras cosas, para que hicieran pulseras.
Sus hermanos pronto desistieron del proyecto vacacional de papá y le regalaron su caja de material a la pequeña. Vicky comenzó a crear algunas pulseras sencillas, para matar el tiempo.
Con el paso de los días elevó la complejidad de los diseños y su creatividad, con sólo ver un par de tutoriales gratuitos, y mostró su habilidad para crear esta decoración utilizada principalmente en mujeres.
Hasta que un día decidió publicar algunas de sus creaciones en su página de Facebook: Victoria Alemán Puga y fue tal su éxito que pronto le llegaron pedidos más grandes para dar como recuerdo en bautizos y primeras comuniones.
Luego de semanas de práctica, hoy Vicky hace pulseras en solo diez minutos y entre sus planes está seguir con su pequeño negocio, que le deja ganancias que utiliza para reinvertir y comprarse algunas cosas personales.
Entre sus metas está acudir a un curso en el vecino estado de Nuevo León en el mes de diciembre para mejorar su técnica de tejido. La pequeña cuenta con el total apoyo de sus padres.
Vicky es una niña que le gusta la escuela y decidió compaginar sus estudios con el negocio. Sin descuidar el último año de primaria, hará pulseras en sus ratos libres, y llevará a venderlas entre sus compañeros y maestros.
Además de estas actividades, le gusta el futbol, leer y hacer pasteles, por lo que también sale a pelotear un rato con sus hermanos en el patio de su casa o algún parque.
“A los 15 años tendré mi tienda de pulseras, por los pronto seguiré aquí desde casa haciendo muchos diseños bonitos para mis clientes y también quiero asistir a cursos para ser cada mejor en lo que hago”.
“Yo me siento muy orgullosa de lo que hago, porque me gusta ganar mi dinero y me gusta mucho hacer pulseras y quiero que cada vez me queden más bonitas y que me lleguen las clientes para que mi negocio crezca”.
La madre de Vicky, Cinthia Puga, la describió como una niña inquieta, que siempre buscar hacer algo, e incluso el tema de las pulseras lo decidieron como terapia ocupacional.
Cinthia cree que en los sueños de su hija y los impulsará hasta donde sea necesario y ver realizados los sueños de la menor, que cursa el sexto de primaria.
“Me siento bien contenta, estoy muy orgullosa. Mi hija es muy hiperactiva, no se está tranquila, siempre está pensando qué hacer, le gusta mucho la limpieza, se pone a hacer pulseras, pero con lugar bien limpio”.
Cinthia siempre apoyará a su pequeña gran emprendedora y exhortó a los padres a no cortarles las alas a sus hijos e impulsarlos para que alcancen sus logros.
“Sí, nosotros desde ahorita que ya tienen una ilusión, un impulso, de ser alguien en la vida, de hacer cosas y nosotros, sus padres, no debemos cortarles sus alas, hay que tratar de hacer lo que hubiéramos querido que hicieran con nosotros, apoyarlos”.
“Yo sé que está cansado, salir de la casa, los niños pero diez o 15 minutos que observes lo que ellos están haciendo, ponerles atención, preguntarles si en realidad les gusta, imagínate a mí me dijo, ma’ quiero hacer pulseras y hoy vendí 300 pesos y vamos a comprar material, se le busca y a darle”.