Agencias.-
La familia de Carlos Aranda, el mexicano encontrado en el Lago Osoyoos, en Canadá confirmó su identidad y está gestionando la repatriación y sepultura en Oaxaca.
Esperan resultados de la necropsia y pruebas de ADN en cuatro meses.
Piden a las autoridades canadienses profundizar en la investigación sobre su muerte, tras su desaparición en julio cerca del hotel Spirit Ridge.
Agradecen el apoyo del gobierno mexicano, la comunidad de Osoyoos, amigos, medios y la ciudadanía.