Agencias.-
Gustavo Loza deseaba mostrar la riqueza de México a través de sus películas, y tuvo esa oportunidad con “Welcome al norte”, una cinta que se convierte en la travesía de un hombre por todo el país
El cineasta hizo la adaptación de la película francesa “Bienvenue chez les Ch’tis”, para tratar de reflejar la forma de ser de los mexicanos, no sólo con sus actitudes, sino también con el uso de los modismos que se emplean en cada región.
La cinta sigue los pasos de “Polito” (Silverio Palacios), un hombre que habita junto con su familia en su natal Izamal, Yucatán, y quien tras una confusión en su trabajo como gerente de una sucursal de mensajería se ve obligado a trasladarse a la oficina de Tijuana.
Guiado por sus prejuicios, llega temeroso a la frontera, pero pronto se da cuenta que sus suposiciones están muy alejadas de la realidad. El rodaje inició en la península de Yucatán, y a lo largo del trayecto del protagonista se ven algunas escenas en lugares como Acapulco, la Ciudad de México y Mazatlán.
Silverio Palacios destacó que el presunto distanciamiento entre las personas de distintos estados muchas veces está en el imaginario colectivo, pues en realidad somos una sociedad solidaria, que está dispuesta a superar sus diferencias para dar la bienvenida al otro.