Antonio Campos / El Sol de Tampico / AMT
Tampico, Tam.- En Tamaulipas, se han atendido a un total de 273 pacientes con Hepatitis “A” de los cuales 170 corresponden a la zona Conurbada, siendo los hombres los encabezan la incidencia de esta enfermedad que se presenta por una inflamación del hígado, la cual si no es tratada adecuadamente llega a causar morbilidad de moderada a grave.
Los especialistas de la Jurisdicción Sanitaria 02 bajo la dirección de José Manuel Sierra Castillo, dieron a conocer que este padecimiento suele transmitirse al ingerir agua o alimentos contaminados o por contacto directo con una persona infectada, en donde casi todos los pacientes se recuperan totalmente y adquieren inmunidad de por vida.
De acuerdo al boletín epidemiológico 2023 de la semana No. 33, se atendieron en las unidades de salud y hospitales de la entidad a 106 mujeres así como 167 hombres, dando un acumulado de 273 pacientes, cifra superior a los 63 casos que se presentaron en el mismo ciclo pero del 2022.
MUNICIPIOS CON MAYORES CASOS
Con base en la información de las autoridades epidemiológicas Ciudad Madero encabeza la incidencia con 86 pacientes atendidos en este periodo, seguido de Tampico con 79; Ciudad Victoria con 36; Matamoros con 31: Reynosa con 17; Ciudad Mante con 8, mientras que Río Bravo y Altamira alcanzaron los 5 casos respectivamente.
El director de la Facultad de Medicina de la UAT campus sur, Raúl de León Escobedo, explicó que si no se trata a tiempo, la hepatitis puede provocar cirrosis, un deterioro progresivo y un mal funcionamiento del hígado. Además de un tipo de cáncer llamado carcinoma hepatocelular.
Mientras que las infecciones por VHB y VHC están relacionadas con aproximadamente el 65% de los cánceres de hígado en todo el mundo. Pero por fortuna hay muchos medicamentos antivirales disponibles para el tratamiento de esta infección crónica.
Ante lo mencionado, comentó que los pacientes llegan a requerir un control médico para garantizar que los fármacos mantengan al virus bajo control y que la enfermedad no progrese a tal grado que causen daño hepático o se conviertan en tumores cancerígenos.
Destacando así la importancia de practicar buenos hábitos de higiene, incluido lavarse las manos con frecuencia, para evitar la trasmisión del virus.